Francisco Cerúndolo protagonizó un emocionante encuentro ante Carlos Alcaraz en la segunda ronda del Masters 1000 de Montecarlo. A pesar de ganar el primer set, el argentino cayó finalmente ante la remontada del español. Analizamos el partido y las futuras proyecciones para Cerúndolo.
El Masters 1000 de Montecarlo 2025 nos dejó un partido vibrante y lleno de contrastes en la segunda ronda: el encuentro entre Francisco Cerúndolo y Carlos Alcaraz. El argentino, número 22 del ranking ATP, sorprendió al mundo del tenis al llevarse el primer set ante el tercer mejor jugador del mundo. Cerúndolo demostró un juego sólido desde el fondo de la cancha, aprovechando la inicial irregularidad de Alcaraz para romper el saque del español y cerrar el primer parcial con un contundente 6-3.
Sin embargo, la experiencia y el poderío de Alcaraz se hicieron notar en el segundo y tercer set. El español ajustó su juego, redujo los errores no forzados y comenzó a conectar ganadores con mayor frecuencia. La intensidad aumentó notablemente, dejando a Cerúndolo sin la posibilidad de contrarrestar el cambio de ritmo. Alcaraz dominó con autoridad, ganando los dos sets restantes con un 6-0 y un 6-1, respectivamente. La remontada del murciano fue impresionante, demostrando por qué es considerado uno de los mejores jugadores del mundo en polvo de ladrillo.
A pesar de la derrota, la actuación de Cerúndolo fue destacable. Ganarle un set a Alcaraz en un Masters 1000 es un logro significativo, mostrando la capacidad del argentino para competir al más alto nivel. El partido evidenció la solidez de Cerúndolo en el inicio, pero también la necesidad de mejorar la constancia y la capacidad de respuesta ante las embestidas de rivales de élite. Su juego en el primer set puede ser un gran punto de partida para futuras mejoras, concentrándose en la consistencia para mantener su nivel durante todo el partido.
La eliminación de Cerúndolo, junto a la de Tomás Etcheverry, significa el fin de la participación argentina en el cuadro individual del Masters 1000 de Montecarlo. Ambos jugadores enfrentaron rivales españoles de alto nivel, demostrando el desafío que representa competir contra la potencia del tenis español en su propia superficie. La experiencia adquirida en este torneo será vital para su crecimiento y para afrontar futuros desafíos en la gira europea sobre polvo de ladrillo. La atención ahora se centra en los próximos torneos, como los ATP 500 de Barcelona y los Masters 1000 de Madrid y Roma, donde se espera un buen desempeño de los tenistas argentinos.
En resumen, la derrota de Cerúndolo ante Alcaraz en Montecarlo, aunque dolorosa, no debe opacar su valiosa actuación. El partido sirvió como una prueba de fuego, mostrando el potencial del tenista argentino y las áreas de mejora para continuar su progresión en el ranking mundial. El futuro del tenis argentino se ve prometedor, y jugadores como Cerúndolo son una parte fundamental de ese futuro.