Iñigo Pérez, entrenador del Rayo Vallecano, mantiene la ilusión intacta por la clasificación a competiciones europeas. Analizamos su visión, las posibilidades del equipo y el camino hacia el éxito.
Tras una sólida temporada, el Rayo Vallecano, bajo la dirección de Iñigo Pérez, se encuentra a nueve jornadas del final de la Liga Española con 40 puntos, prácticamente asegurando la permanencia y alimentando el sueño europeo. En una reciente conferencia de prensa, Pérez afirmó rotundamente: "En ningún momento pienso que no podamos jugar en Europa". Esta declaración refleja la confianza y ambición del técnico navarro, quien se apoya en la solidez del equipo y en la experiencia acumulada.
La eliminación de la Real Sociedad en las semifinales de la Copa del Rey ha abierto una puerta inesperada hacia Europa para el séptimo y posiblemente hasta el octavo clasificado de la Liga. Esta coyuntura beneficia al Rayo, que se encuentra en una excelente posición para aprovechar esta oportunidad. Pérez, sin embargo, mantiene los pies en la tierra: "Prefiero pensar en los 40 puntos y ahora, una vez conseguidos, hay que intentar ganar todos los partidos".
El entrenador hace referencia a la temporada 2022/2023, cuando, siendo segundo entrenador bajo Andoni Iraola, el Rayo también llegó a la jornada 29 con 40 puntos y aspiraciones europeas. Sin embargo, la falta de victorias en los últimos partidos truncó esas aspiraciones. Esta experiencia pasada sirve de lección: "Aquella temporada con Iraola quizás hubo vértigo. No fuimos capaces de ganar aquellos partidos que te permiten estar en esos objetivos. De ahí viene el tema de las nueve finales que hablamos", admite Pérez. Esta vez, el objetivo es evitar el vértigo y afrontar cada partido con la misma intensidad y determinación.
El próximo encuentro contra el Espanyol se presenta como crucial. Una victoria prácticamente aseguraría la permanencia y mantendría vivo el sueño europeo. Pérez describe el partido como "un partido cerrado en el que nosotros tendremos que elaborar juego para hacer la diferencia", destacando la energía y la identidad de juego de ambos equipos. La diferencia entre jugar para competir por un puesto europeo y simplemente asegurar la permanencia es significativa, según el entrenador, pero la clave reside en la imposición del juego del Rayo Vallecano.
La ambición de Iñigo Pérez es palpable. Su experiencia, su análisis realista y su confianza en el equipo son pilares fundamentales para el optimismo que reina en el Rayo Vallecano. La afición espera con ansias las próximas nueve jornadas, con la esperanza de celebrar un final de temporada histórico para el club. La lucha por Europa está abierta, y el Rayo Vallecano, bajo el liderazgo de Iñigo Pérez, se presenta como un competidor serio y decidido a alcanzar su objetivo.