El pasado sábado, el delantero Leandro Díaz se vio envuelto en un escándalo durante un amistoso entre Lanús y Tigre. Tras un cruce verbal con un jugador juvenil de Tigre, Díaz le propinó una patada estando en el suelo. Al intervenir Alan Barrionuevo, compañero del juvenil, en defensa de su compañero, Díaz le asestó un puñetazo en la cara, causándole lesiones que requirieron atención médica. Barrionuevo sufrió el hundimiento de algunos dientes y parte de las encías, según informes periodísticos. El incidente, ocurrido a pocos metros de los dirigentes de Lanús, obligó al árbitro a finalizar el partido anticipadamente. Este hecho, sumado a las tensiones previas entre Díaz y la dirigencia del club, podrían sellar la salida del jugador del Granate. Hace apenas un mes y medio, tras anotar el gol del triunfo en el clásico ante Banfield, Díaz había anunciado su decisión de abandonar Lanús, expresando su descontento con los directivos y asegurando que no tenía más para ofrecerle al club. Aunque inició la pretemporada, la agresión en el amistoso parece haber roto definitivamente el vínculo. La situación es compleja. Si bien el entrenador Mauricio Pellegrino había expresado su deseo de contar con Díaz para la temporada, el incidente podría ser irreconciliable. El club aún no ha emitido un comunicado oficial, pero la prensa deportiva asegura que la dirigencia se encuentra evaluando las acciones a tomar y que la salida de Díaz es la opción más probable. La trayectoria de Díaz en Lanús es extensa, con etapas en diferentes clubes intercaladas. Su regreso al club en 2023 fue promisorio, con un gran rendimiento en su primer año. Sin embargo, las lesiones en 2024 disminuyeron considerablemente su nivel. Su carrera lo ha llevado a vestir las camisetas de Tigre, Huracán, Everton de Chile, Atlético Tucumán (en dos ocasiones), Ferro, Sarmiento, Atlético Rafaela, Tiburones Rojos de México y Estudiantes. El incidente ha generado un fuerte impacto en la opinión pública y entre los aficionados de Lanús. Mientras algunos lamentan la situación y la posible pérdida de un jugador experimentado, otros consideran que la actitud de Díaz es inaceptable y que la decisión de la dirigencia de separarlo del plantel sería la correcta. El futuro de Leandro Díaz está en el aire, pero parece claro que su paso por Lanús podría haber llegado a su fin de manera abrupta y escandalosa.