Tapia reelecto: ¿Triunfo o golpe de estado? La AFA y el Gobierno chocan en la Justicia

El fútbol argentino se encuentra en medio de una crisis institucional tras la reelección por aclamación de Claudio "Chiqui" Tapia como presidente de la AFA. El evento, que tuvo lugar el pasado jueves, fue marcado por la polémica y desató un fuerte enfrentamiento con el gobierno de Javier Milei, quien considera que la elección fue ilegal y amenaza con una ofensiva judicial. Tapia, líder de Barracas Central, logró imponer su continuidad al frente de la entidad madre del fútbol hasta el 2028, un año después del fin del mandato de Milei. Su reelección se llevó a cabo a pesar de las advertencias del gobierno, que tildó la convocatoria como "inválida e irregular". La Inspección General de Justicia (IGJ) incluso emitió una resolución declarando ineficaz la asamblea, argumentando que se violaron la ley, el estatuto y el reglamento electoral de la AFA. No obstante, Tapia logró el apoyo unánime de los clubes, quienes aprobaron, entre otras medidas, la creación de una “Liga de los campeones del mundo” con 30 equipos, un cambio que generó un fuerte rechazo por parte del gobierno. Batalla judicial: ¿intervención o nulidad? El gobierno de Milei ha anunciado que iniciará una batalla judicial para invalidar la reelección de Tapia y los cambios aprobados en la asamblea. El titular de la IGJ, Daniel Roque Vítolo, ha declarado que la AFA "violó la ley" y que "la palabra final la tendrá la Cámara Civil". Sin embargo, la AFA se defiende argumentando que la Justicia autorizó la realización de la asamblea. Los abogados de la entidad aseguran que el juez Christian Ricardo Pettis habilitó la reunión, mientras que el Ministerio de Justicia insiste en que el juez no otorgó tal autorización. La batalla judicial se centra en la validez de la asamblea y el alcance de la resolución de la IGJ. El gobierno busca una intervención de la AFA, mientras que la entidad se aferra a la legalidad de la elección. Poder en juego: ¿Milei vs. Tapia? Más allá de la batalla judicial, este conflicto expone una lucha de poder entre el gobierno y el presidente de la AFA. Milei, con su discurso de "cambio radical", busca imponer su autoridad en todas las áreas del Estado, incluyendo el fútbol. Tapia, por su parte, representa el poder tradicional del fútbol argentino, y ha logrado construir un fuerte liderazgo dentro de la AFA. El enfrentamiento entre ambos personajes no solo es un choque institucional, sino que también refleja una disputa por la influencia en el deporte más popular del país. ¿Cuál es el futuro del fútbol argentino? El conflicto judicial entre la AFA y el gobierno aún no tiene un desenlace claro. La batalla legal podría prolongarse por meses, dejando en suspenso el futuro del fútbol argentino. La incertidumbre sobre la validez de la asamblea y los cambios aprobados generan un panorama complejo para el desarrollo de las competencias nacionales e internacionales. Mientras tanto, el fútbol argentino se encuentra dividido. Los clubes, a excepción de Estudiantes y Talleres de Córdoba, se alinean detrás de Tapia. El gobierno, por su parte, busca imponer su autoridad y controlar la AFA. La batalla legal que se avecina determinará el rumbo del fútbol argentino en los próximos años.