El reconocido ultraliberal argentino, Javier Milei, generó controversia al afirmar que, en caso de ser electo presidente, no realizaría negocios con Pekín debido a su rechazo a las 'transacciones con comunistas'. Estas declaraciones no pasaron desapercibidas y generaron un debate en torno a las relaciones económicas internacionales. Ante esta situación, el vocero de la Cancillería china respondió a Milei, sugiriendo que si el ultraliberal visitara su país, podría cambiar de opinión. Además, destacó que China es un estado de derecho y que la libertad personal de los ciudadanos está protegida por la Constitución. Este intercambio entre Milei y la Cancillería china refleja las diferencias ideológicas y políticas que existen en el ámbito internacional. Mientras el ultraliberal argentino muestra un claro rechazo al comunismo, China defiende su sistema político y económico basado en el socialismo. Sin embargo, es importante destacar que las relaciones económicas entre Argentina y China son relevantes. China es uno de los principales socios comerciales de Argentina, y muchas empresas argentinas dependen de las exportaciones hacia este país. Por lo tanto, las declaraciones de Milei podrían tener repercusiones en el ámbito económico. En conclusión, las declaraciones del ultraliberal argentino Javier Milei sobre China han generado controversia y debate. Mientras Milei rechaza las 'transacciones con comunistas', la Cancillería china sugiere que cambiaría de opinión si visita el país. Esta situación refleja las diferencias ideológicas y políticas entre ambos países, y podría tener repercusiones en el ámbito económico.