Pablo Daviña, presidente de la Cámara de Inmobiliaria de Misiones, expresa su opinión sobre la propuesta de regulación de los alquileres temporarios que se está debatiendo en el Senado. Considera que la medida se centra más en cuestiones tributarias que en abordar las causas subyacentes.
En medio de los debates en el Senado sobre la regulación de los alquileres temporarios, Pablo Daviña, presidente de la Cámara de Inmobiliaria de Misiones, ha dado su punto de vista sobre esta propuesta. Para Daviña, esta regulación se enfoca más en aspectos tributarios que en abordar las causas subyacentes del problema.
El presidente de la Cámara de Inmobiliaria de Misiones explica que, si bien es importante establecer ciertos controles en el mercado de alquileres temporarios para garantizar la seguridad y protección de los usuarios, la prioridad debería ser identificar y resolver las causas que llevaron a la proliferación de estas modalidades de alojamiento.
Daviña sostiene que la regulación tributaria no es suficiente para resolver la situación. Considera que es necesario analizar y abordar las razones por las cuales los alquileres temporarios se han vuelto tan populares en los últimos años, y buscar soluciones más integrales y efectivas.
El presidente de la Cámara de Inmobiliaria de Misiones plantea que es fundamental comprender qué es lo que atrae a los turistas y viajeros a optar por los alquileres temporarios en lugar de los hoteles tradicionales. Solo de esta manera se podrá implementar una regulación adecuada que responda a las necesidades y demandas de ambas partes.
En este sentido, Daviña destaca que la regulación debe tener en cuenta aspectos cruciales como la calidad y seguridad de los alojamientos temporarios, la transparencia en los contratos y transacciones, y la protección de los derechos de los propietarios y de los inquilinos.
El presidente de la Cámara de Inmobiliaria de Misiones propone la creación de un marco regulatorio que fomente la formalidad y la profesionalización del sector de alquileres temporarios. Esto incluiría la exigencia de registros, licencias y cumplimientos de normativas específicas, así como la promoción de buenas prácticas y la educación tanto para los propietarios como para los usuarios.
En conclusión, Pablo Daviña considera que la regulación de los alquileres temporarios debe ir más allá de una cuestión tributaria. Es necesario abordar las raíces del problema y buscar soluciones que garanticen una convivencia armoniosa entre los diferentes actores involucrados, además de promover la calidad y seguridad en este tipo de alojamientos cada vez más populares.