La travesía por la región selvática que separa a Colombia de Panamá se ha convertido en un paso irregular extremadamente peligroso para los inmigrantes. En total, 170 personas han desaparecido sin dejar rastro.
La región selvática que une a Colombia y Panamá ha sido durante mucho tiempo un camino utilizado por los inmigrantes en busca de una vida mejor. Sin embargo, en los últimos años, este paso se ha vuelto cada vez más peligroso y mortal. La falta de rutas oficiales y las dificultades del terreno hacen que sea extremadamente complicado cruzar esta frontera de manera segura.
Actualmente, se estima que al menos 170 personas han desaparecido mientras intentaban cruzar esta peligrosa región. Estas personas, en su mayoría provenientes de países como Haití, Cuba y África, han dejado todo atrás en busca de un futuro mejor. Sin embargo, se encuentran atrapadas en un camino lleno de peligros y sin ninguna garantía de llegar a su destino.
La falta de información y registro sobre estas personas desaparecidas es especialmente preocupante. Sin pistas ni indicios de su paradero, sus familias están desesperadas por obtener noticias sobre su bienestar. Esta situación resalta la necesidad de una mayor cooperación internacional para abordar la problemática de la migración y garantizar la seguridad y protección de aquellos que se ven obligados a dejar sus países de origen.
La ruta por la región selvática entre Colombia y Panamá es utilizada por traficantes de personas y grupos delictivos que se aprovechan de la vulnerabilidad de los migrantes. Se han reportado casos de abusos y violaciones de los derechos humanos, así como de extorsión y secuestro.
Es fundamental que los gobiernos de ambos países, así como la comunidad internacional, tomen medidas urgentes para combatir esta problemática. Se requiere la creación de rutas seguras y legales para los migrantes, así como el fortalecimiento de la cooperación en materia de seguridad, para evitar más desapariciones y tragedias en esta peligrosa región.
La situación en la región selvática entre Colombia y Panamá es un reflejo de las dificultades y peligros a los que se enfrentan los migrantes en su búsqueda de una vida mejor. Es necesario actuar de inmediato y trabajar juntos para garantizar la seguridad y protección de todos aquellos que se encuentran en tránsito.