La fiesta nacional de la Santa es uno de los eventos más esperados del año en Argentina, donde miles de personas se reúnen para celebrar y rendir homenaje a su santa patrona. Sin embargo, este año, la festividad se vio empañada por una manifestación que hizo eco de denuncias de represión y ejecuciones extrajudiciales. Según la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), se han recibido múltiples reportes de violencia por parte de las fuerzas de seguridad durante protestas en el país. Estos informes incluyen casos de represión violenta y ejecuciones extrajudiciales, lo cual ha generado una gran preocupación en la opinión pública. Durante la manifestación, los participantes portaban pancartas y coreaban consignas exigiendo el fin de la represión y justicia para las víctimas de las ejecuciones extrajudiciales. Además, se hizo un llamado a las autoridades para que investiguen y sancionen a los responsables de estos actos. La protesta tuvo lugar en el centro de la ciudad, donde los manifestantes se congregaron pacíficamente para expresar su rechazo a la violencia y exigir cambios en el sistema de seguridad del país. La convocatoria fue masiva, contando con la participación de organizaciones de derechos humanos, ciudadanos comunes y familias de las víctimas. Aunque las autoridades no se han pronunciado oficialmente al respecto, se espera que estas denuncias sean investigadas y se tomen medidas para garantizar la seguridad y respeto a los derechos humanos de todos los ciudadanos. En conclusión, la manifestación llevada a cabo durante la fiesta nacional de la Santa fue un claro mensaje de repudio a la represión y las ejecuciones extrajudiciales. La sociedad argentina ha alzado su voz exigiendo justicia y un cambio en el sistema de seguridad del país. Solo el tiempo dirá si estas demandas serán escuchadas y si se tomarán acciones concretas para abordar esta problemática.