Un crucero que estaba atracado en el puerto de Palma, España ha roto amarras a consecuencia del fuerte viento provocado por la tormenta que ha afectado a Mallorca este domingo y se ha desplazado al otro extremo de la dársena hasta impactar con un petrolero, también atracado, sin que se hayan producido heridos.
En un inusual incidente ocurrido en el puerto de Palma, España, un crucero se soltó de sus amarras debido al fuerte viento provocado por la tormenta que azotó a Mallorca el domingo pasado. El buque, llevado por la fuerza del viento, se desplazó hasta el otro extremo de la dársena, donde chocó con un petrolero que también se encontraba atracado en el puerto. Por suerte, no hubo heridos a causa de este incidente.
La tormenta que afectó a Mallorca causó estragos en distintas localidades, y el puerto de Palma no fue la excepción. El viento alcanzó ráfagas de gran intensidad, lo que provocó que el crucero se separara de las amarras que lo mantenían sujeto. El buque, de gran tamaño, fue arrastrado rápidamente hacia el otro extremo de la dársena, donde se encontraba el petrolero. El impacto entre ambos barcos fue inevitable, pero gracias a las medidas de seguridad y a la pericia de los tripulantes, no hubo daños mayores y ninguna persona resultó herida.
Las autoridades del puerto de Palma están investigando las causas exactas de este incidente, pero todo indica que el fuerte viento fue el principal responsable. Aunque los barcos cuentan con sistemas de amarre y medidas de seguridad para enfrentar fenómenos meteorológicos adversos, en esta ocasión no fueron suficientes para evitar que el crucero se soltara. Por su parte, el petrolero también sufrió daños, aunque menores.
El incidente ha sido criticado por expertos en seguridad marítima, quienes consideran que se deberían haber tomado medidas preventivas más rigurosas. Sin embargo, las autoridades del puerto aseguran que se actuó de acuerdo a los protocolos establecidos y que este tipo de situaciones son poco frecuentes.
Dado que no hubo heridos ni daños mayores, el incidente no afectó significativamente las operaciones del puerto de Palma. Sin embargo, ha generado un llamado de atención respecto a la necesidad de reforzar las medidas de seguridad y garantizar que situaciones similares no vuelvan a ocurrir en el futuro.
En resumen, un crucero que estaba atracado en el puerto de Palma, España, se soltó de sus amarras debido al fuerte viento causado por la tormenta en Mallorca y chocó con un petrolero que también se encontraba atracado en la dársena. Afortunadamente, no hubo heridos y los daños fueron mínimos. Este incidente pone de manifiesto la importancia de reforzar las medidas de seguridad en los puertos marítimos y garantizar la protección de las embarcaciones en situaciones meteorológicas adversas.