El Mburuvicha (jefe) Ramón Báez, líder de la comunidad, ha expresado su preocupación por el uso indiscriminado de agroquímicos en las plantaciones cercanas al arroyo Yasí Argentino, que es la única fuente de agua potable para su comunidad. La zona en cuestión está demarcada por la Ley Nacional 26.160 y abarca una extensión de 578 hectáreas, ubicada cerca del Parque Provincial Península. La Ley Nacional 26.160 establece la emergencia en materia de posesión y propiedad de las tierras que tradicionalmente ocupan las comunidades indígenas en todo el territorio nacional. Esta ley busca regularizar la situación de las tierras y garantizar los derechos de las comunidades indígenas. Sin embargo, a pesar de la protección legal, los miembros de la comunidad temen que los agroquímicos utilizados en las plantaciones cercanas puedan contaminar el arroyo Yasí Argentino y poner en peligro la salud de quienes dependen de él. Los agroquímicos son sustancias utilizadas en la agricultura para proteger los cultivos de plagas y enfermedades. Si bien su uso es necesario para garantizar la producción de alimentos, también pueden ser perjudiciales para la salud humana y el medio ambiente cuando se utilizan de manera incorrecta o en exceso. Los efectos de la exposición a agroquímicos pueden variar desde síntomas leves, como irritación de la piel y los ojos, hasta problemas más graves, como cáncer y trastornos del sistema nervioso. Además, los residuos de agroquímicos pueden contaminar los cuerpos de agua circundantes, afectando la flora y fauna acuática y poniendo en peligro los ecosistemas. Ante esta situación, la comunidad ha solicitado a las autoridades correspondientes que realicen controles exhaustivos de las plantaciones y verifiquen el correcto uso de los agroquímicos. Además, han hecho un llamado a la conciencia ambiental de todos los actores involucrados en la producción agropecuaria, para que adopten prácticas sostenibles que minimicen el impacto en el medio ambiente y la salud humana. Es importante recordar que la protección del medio ambiente y la salud de las comunidades es responsabilidad de todos. El uso responsable de los agroquímicos y la adopción de prácticas agrícolas sostenibles son fundamentales para garantizar la sustentabilidad de nuestro planeta y el bienestar de las generaciones futuras.