Praga, capital de la República Checa, es un destino turístico cada vez más popular. Con su rica historia y su magnífica arquitectura, la ciudad es simplemente impresionante. En cada esquina de Praga encontrarás reminiscencias del pasado, desde los castillos y palacios medievales hasta los históricos puentes sobre el río Moldava. Una de las atracciones más populares de Praga es el Castillo de Praga, una imponente fortaleza que se erige sobre la ciudad. Con sus casi 1000 años de antigüedad, el castillo ofrece vistas panorámicas de la ciudad y alberga la famosa catedral de San Vito. Otro punto de interés destacado es el Puente de Carlos, una maravilla de la arquitectura gótica. El puente, con más de 600 años de historia, está lleno de estatuas y ofrece vistas espectaculares del río Moldava y del casco antiguo de Praga. No te pierdas también el Reloj Astronómico de Praga en la Plaza de la Ciudad Vieja. Este reloj medieval está adornado con figuras en movimiento y ofrece un espectáculo único cada hora en punto. Praga es famosa por su cerveza y sus deliciosos platos de la gastronomía checa. No puedes irte sin probar el tradicional goulash checo, servido con pan de centeno. Y, por supuesto, ¡no olvides disfrutar de una buena cerveza checa en uno de los acogedores bares de la ciudad! Además de su impresionante arquitectura y su deliciosa comida, Praga también ofrece una vibrante vida nocturna. Desde clubes de música en vivo hasta pubs tradicionales checos, siempre encontrarás algo interesante para hacer después del anochecer. En resumen, Praga es una ciudad que te dejará sin aliento con su belleza y su historia. Desde sus castillos y palacios hasta sus puentes y su comida deliciosa, hay algo para todos los gustos en esta joya histórica en el corazón de Europa.