En un insólito episodio, los habitantes del Barrio Itaembé Guazú en Posadas, Misiones, lograron captar imágenes de un ñandú que paseaba tranquilamente por las calles. El hecho ocurrió en el sector 9, una zona en proceso de construcción.
En un insólito episodio, los vecinos del Barrio Itaembé Guazú en la ciudad de Posadas, Misiones, fueron testigos de un encuentro poco común con la fauna local. Un ñandú, ave autóctona de la región, fue visto paseando libremente por las calles del sector 9 del barrio, que actualmente se encuentra en obras.
El ñandú, también conocido como el avestruz sudamericano, es una especie muy llamativa debido a su gran tamaño y su aspecto peculiar. Este hecho causó sorpresa y asombro entre los habitantes de la zona, quienes no estaban acostumbrados a ver este tipo de animales deambulando por las calles de su barrio.
Rápidamente, varios vecinos capturaron imágenes y videos del ñandú paseando tranquilamente entre los autos estacionados y las viviendas en construcción. Algunos incluso se acercaron al animal, manteniendo una distancia prudente para no asustarlo.
Las autoridades fueron alertadas sobre la presencia del ñandú en el barrio y rápidamente se pusieron en marcha para garantizar la seguridad del ave y de los habitantes. Expertos en fauna fueron enviados al lugar para evaluar la situación y tomar las medidas necesarias.
Según los especialistas, es posible que el ñandú haya escapado de algún criadero o reserva cercana y se haya aventurado en busca de comida. No es común ver ñandús en áreas urbanas, ya que generalmente prefieren hábitats más rurales y abiertos.
Finalmente, luego de varios intentos, los expertos lograron capturar al ñandú y trasladarlo a un lugar seguro, lejos de la zona urbana. Según informaron, el ave se encontraba en buen estado de salud y fue liberada en una reserva natural.
Este insólito episodio dejó a los vecinos del Barrio Itaembé Guazú con una experiencia inusual y llena de sorpresas. Sin duda, es un recordatorio de que la naturaleza puede sorprendernos en cualquier momento, incluso en medio de una ciudad en pleno crecimiento. Esperamos que el ñandú encuentre su camino de regreso a su hábitat natural y que los vecinos sigan disfrutando de su barrio con la tranquilidad de saber que la fauna local está protegida.