Recientemente, las campeonas españolas que han ganado un mundial se han visto desfavorecidas por la falta de atención mediática en comparación al presidente de la Federación. Es lamentable que en un momento de celebración y reconocimiento a su talento y dedicación, se vean injustamente relegadas a un segundo plano. ¿Por qué esta desigualdad mediática? Una posible explicación es la persistencia de estereotipos de género en el ámbito deportivo. A nivel mundial, el fútbol sigue siendo considerado un deporte masculino por excelencia, y esto se refleja en la cobertura mediática. Además, existe una falta de inversión y apoyo en el fútbol femenino a nivel institucional. Si los organismos responsables no destinan los recursos necesarios, es difícil que las jugadoras puedan competir en igualdad de condiciones y alcanzar la visibilidad que merecen. Es importante destacar que el éxito de las campeonas españolas en el mundial es un logro colectivo que merece ser reconocido y valorado. Estas mujeres han dedicado años de esfuerzo y sacrificio para llegar a la cima de su deporte, y es fundamental que se les dé el reconocimiento y la visibilidad que se merecen. En cuanto al presidente de la Federación, es comprensible que se le preste atención mediática debido a su rol en el desarrollo y la gestión del fútbol en España. Sin embargo, esto no debería ser a costa de los logros de las jugadoras y el crecimiento del fútbol femenino en el país. La desigualdad mediática en el deporte no es un fenómeno exclusivo de España, sino que es una problemática global. Es responsabilidad de los medios de comunicación y de la sociedad en general cambiar esta realidad y dedicar la atención necesaria al fútbol femenino. En conclusión, es fundamental reconocer y valorar los logros de las campeonas españolas que han ganado un mundial. No es justo que se hable más del presidente de la Federación a nivel internacional, ya que esto refuerza la desigualdad mediática existente en el deporte. Es necesario trabajar juntos para promover una mayor visibilidad y apoyo al fútbol femenino, y así garantizar que las nuevas generaciones de jugadoras cuenten con las mismas oportunidades y reconocimiento que sus pares masculinos.