Un sueño nacido en un asado: La historia del triunfo de las parejas de baile de Neuquén y Río Negro en el Festival Nacional de Zamba comienza de manera informal, en un asado entre amigos. La idea, inicialmente una broma, de participar en el prestigioso certamen tucumano, prendió fuego la pasión y la determinación de un grupo de bailarines provenientes de diferentes localidades de ambas provincias.
Representando la diversidad patagónica: La delegación, compuesta por siete parejas, representa la rica diversidad geográfica y cultural de la Patagonia Norte. Bolsón, Godoy, Allen, Centenario, Zapala, Aluminé, Chos Malal, Cinco Saltos, Andacollo y Jacobacci; cada localidad aportó su energía y talento para conformar los grupos “Como la gente del Sur” y “Delegación Patagónica”, bajo la dirección de los profesores José Luis Medina y Raúl Vallejo.
Más que un concurso: una declaración de identidad: Para los bailarines, la participación en el festival no se trató solo de una competencia. Fue la oportunidad de llevar al norte del país la cadencia, la identidad y la cultura patagónica. La presentación de un valsecito, que les otorgó el segundo puesto en la categoría “Conjunto de Danza Tradicional”, fue un primer paso en el camino a la consagración. El primer puesto en la categoría “Conjunto de Zamba”, con una zamba sureña llena de alma y pasión, coronó su esfuerzo y dedicación.
El camino al triunfo: Cuatro meses de intensos ensayos y la organización de actividades para recaudar fondos para el viaje a Tucumán, fueron el precio del éxito. El sacrificio y la perseverancia se vieron recompensados con el primer premio, pero para los bailarines, el verdadero premio fue el haber llevado en alto el nombre del folclore sureño, un folclore joven que se abre paso con fuerza en el escenario nacional.
Los protagonistas: La lista de participantes incluye a parejas provenientes de distintas localidades de Neuquén y Río Negro, demostrando el trabajo en equipo y la unidad en pos de un objetivo común. Entre ellos destacan: José Luis Medina (Bolsón) y Silvia Ávila (Godoy), Tania Bertinat (Allen) y Raúl Vallejo (Centenario), Patricia Caamaño (Neuquén Cap.) y Alberto Bazán (Zapala), Mailen Paredes (Aluminé) y Saúl Ceballos (Chos Malal), Florencia Jiménez (Neuquén Cap.) y Eduardo Salazar (Cinco Saltos), Ángel Pacheco (Andacollo) y José Hernández (Jacobacci), Walter Rojas (Neuquén Cap.) y Ayelén Campos (Neuquén Cap.).
Un legado de pasión y perseverancia: La historia del triunfo de la zamba patagónica en Tucumán es más que una noticia; es un ejemplo de cómo la amistad, el trabajo en equipo, la perseverancia y la pasión por la danza pueden convertir un sueño en realidad. Es un legado para las nuevas generaciones de bailarines que aspiran a llevar la cultura sureña al mundo.