Descubre la historia del puesto de empanadas argentino en el Gran Premio de Mónaco, un punto de encuentro para compatriotas y una iniciativa solidaria apadrinada por el Príncipe Alberto.
En el corazón de Montecarlo, durante el Gran Premio de Mónaco de Fórmula 1, un aroma inconfundible cautiva a los transeúntes: el de las empanadas argentinas. Detrás de este irresistible aroma se encuentra el puesto de la Association Monaco Argentina (AMS), un verdadero búnker argentino liderado por María Eugenia Rubinelli y su esposo Michele, que se ha convertido en un punto de encuentro para los aficionados argentinos de la F1.
Más que un simple puesto de comida, el stand de la AMS es una iniciativa solidaria. Durante el fin de semana de carreras, la venta de empanadas, choripanes y bebidas genera fondos que se destinan a proyectos benéficos en Argentina, enfocados en la educación, la salud y el deporte infantil. El propio Príncipe Alberto ha apadrinado esta noble causa, dando un sello de prestigio a la iniciativa.
María Eugenia, oriunda de Buenos Aires con años de residencia en La Pampa, y Michele, un italiano con un corazón argentino, han creado un espacio acogedor donde la bandera argentina ondea con orgullo. "Como agradecimiento por lo que disfrutamos en Mónaco, decidimos ayudar a las comunidades argentinas, especialmente a los niños y adolescentes", comenta María Eugenia.
El stand se ha convertido en un imán para los argentinos en Mónaco. La presencia de Franco Colapinto, piloto argentino de Fórmula 1, ha incrementado aún más la afluencia, con lemas como "Franco, yo te banco" presentes en los flyers distribuidos. Incluso se realizaron sorteos de entradas para el Gran Premio, creando un ambiente festivo y solidario.
El trabajo de la AMS trasciende las fronteras de Mónaco. Sus proyectos benefician a comunidades vulnerables en distintas regiones de Argentina. Se han llevado a cabo programas de enseñanza de natación en Península Valdés en colaboración con la Fundación Charlene, y se han enviado equipos médicos al Chaco para brindar atención sanitaria a madres e hijos.
La pareja y sus colaboradores trabajan incansablemente para recaudar fondos. La experiencia se complementa con la alegría de compartir con compatriotas, mitigando la nostalgia y fortaleciendo los lazos entre argentinos en el extranjero. Su próximo gran proyecto es un evento en el estadio Kempes de Córdoba, en colaboración con 'No Finish Line', un evento benéfico monegasco que promueve el deporte y la solidaridad.
El puesto de empanadas en Montecarlo, más que un negocio, es una historia de solidaridad, de pasión por Argentina y una muestra de cómo el deporte y la gastronomía pueden unirse para generar un impacto positivo en la vida de niños y adolescentes necesitados.