Un doble abandono de Mercedes en la clasificación del Gran Premio de Mónaco ensombrece el sábado. George Russell se une a Lewis Hamilton en la debacle, dejando a la escudería alemana fuera de la lucha por la pole.
El Gran Premio de Mónaco 2025 ha comenzado con un golpe devastador para Mercedes. Tras la eliminación de Lewis Hamilton en la Q1, su compañero de equipo, George Russell, sufrió un fallo mecánico en la Q2, dejando a ambos pilotos fuera de la clasificación y sumiendo a la escudería en una crisis de rendimiento.
Russell se detuvo en pista, reportando por radio una pérdida de potencia. Aún se desconoce la causa exacta del incidente, aunque las primeras hipótesis apuntan a un posible problema eléctrico o, quizás, un ligero contacto con el muro, aunque esto último no ha sido confirmado. La detención obligó a la exhibición de bandera roja, interrumpiendo la sesión y provocando la vuelta a boxes de todos los pilotos.
Este suceso, que ha dejado a Mercedes con una posición de salida totalmente desfavorable, plantea serias dudas sobre la competitividad del equipo en el exigente circuito de Mónaco. La falta de potencia del monoplaza de Russell es preocupante, especialmente considerando que se produce justo después de la temprana eliminación de Hamilton.
Mientras tanto, otras escuderías aprovecharon la situación. Lando Norris de McLaren logró adjudicarse la pole position tras una actuación impecable, mientras que Ferrari y Red Bull se perfilan como los principales competidores en la lucha por el podio. La carrera del domingo se vislumbra emocionante e impredecible, con la posibilidad de que equipos habitualmente menos competitivos puedan beneficiarse de las dificultades de Mercedes.
La eliminación de ambos Mercedes genera un gran debate sobre la fiabilidad del equipo y sobre la estrategia que implementarán en las próximas carreras. La falta de ritmo mostrado en los entrenamientos y la culminación de estos problemas en la clasificación, sugieren que Mercedes debe revisar a fondo su configuración y plantear soluciones urgentes para recuperar su competitividad. Las próximas horas serán cruciales para entender el alcance de la avería y para determinar qué medidas tomará Mercedes para evitar repetir este escenario en futuras carreras. El análisis de los datos y las investigaciones sobre el monoplaza de Russell serán claves para comprender este inesperado fracaso.
Las redes sociales han explotado con reacciones de sorpresa y preocupación por la situación de Mercedes. Muchos aficionados se preguntan si este resultado es un indicativo de la verdadera competitividad del equipo o simplemente un evento aislado. El domingo, todos los ojos estarán puestos en la estrategia de Mercedes para intentar remontar desde el fondo de la parrilla y minimizar los daños en la lucha por el mundial. La lucha por la victoria en Mónaco está ahora más abierta que nunca.
En el resto de la clasificación, otros pilotos también experimentaron problemas. Carlos Sainz y Yuki Tsunoda se vieron eliminados en la Q2, sumándose a las dificultades de Mercedes. La clasificación ofreció emociones fuertes hasta el final, dejando una gran expectación para la carrera del domingo.