El juicio por la muerte de Diego Maradona enfrenta una nueva y grave controversia. Un video obtenido por Infobae muestra a la jueza Julieta Makintach siendo seguida por un camarógrafo en los pasillos del Tribunal Oral en lo Criminal Nº3 de San Isidro, días previos al inicio del juicio. Las imágenes, fechadas el 9 de marzo de 2025, muestran a la jueza con un atuendo similar al que usó en la primera audiencia, reforzando la sospecha de una participación premeditada en la producción audiovisual. Este material, según fuentes judiciales, forma parte de una investigación que involucra presuntas irregularidades en la producción de un documental sobre el juicio. La jueza habría ingresado al palacio de justicia con un grupo de productores audiovisuales, posteriormente identificados, quienes fueron vistos grabando clandestinamente durante las audiencias. La investigación abarca la presunta comisión de delitos como incumplimiento de los deberes de funcionario público, encubrimiento, obstrucción a la justicia y sustracción de medios de prueba. Se están investigando a varias productoras audiovisuales, incluyendo a Pegsa, La Doble y Feelco. Pegsa, propiedad del ex jugador de Los Pumas Agustín Pichot y el hermano de la jueza, ha negado cualquier participación en las filmaciones dentro del tribunal. La declaración de una policía encargada de la custodia del tribunal resultó clave para la investigación. La agente declaró que recibió un mensaje de la jueza Makintach instruyéndola a permitir el acceso a su 'gente', refiriéndose a los individuos involucrados en la filmación. Este testimonio, junto con otros elementos probatorios, ha llevado a seis allanamientos donde se incautó material fílmico, discos rígidos y otros dispositivos electrónicos para su peritaje. El abogado defensor del neurocirujano Leopoldo Luque, uno de los imputados, ha recusado a la jueza Makintach debido a la presunta producción del documental, argumentando que compromete su imparcialidad. La jueza, por su parte, ha negado cualquier irregularidad y ha asegurado su compromiso con la imparcialidad en el proceso. Sin embargo, la gravedad de las acusaciones y las pruebas recolectadas plantean la posibilidad de una anulación del juicio, con consecuencias devastadoras para todas las partes involucradas. La reanudación del juicio está en suspenso mientras se completa la investigación y se evalúan las posibles consecuencias de estas revelaciones. Este escándalo ha generado un debate público sobre la transparencia judicial, la ética en la producción de documentales y el impacto de estas controversias en la búsqueda de justicia en un caso de alta sensibilidad pública como el de la muerte de Diego Armando Maradona.