Impacto de la Explosión de Caldera en Edificio de Recoleta: Evacuación y Consecuencias

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Una explosión de caldera en un edificio de Recoleta, Buenos Aires, provocó la evacuación de más de 70 vecinos en la madrugada del 20 de mayo de 2025. El incidente generó daños materiales significativos y puso de manifiesto la importancia de la seguridad en edificios antiguos.

Una potente explosión en la caldera de un edificio ubicado en la calle Sánchez de Bustamante al 1800, en el exclusivo barrio de Recoleta, Buenos Aires, conmocionó a la ciudad en la madrugada del 20 de mayo de 2025. El incidente obligó a la evacuación de más de 70 residentes, entre ellos dos personas sordas que requirieron asistencia especial para su descenso, y generó importantes daños materiales.

La explosión, ocurrida en el segundo subsuelo del edificio de 11 pisos, provocó el desplazamiento de dos portones, la rotura de paneles de vidrio, la caída de mampostería y la inundación del garaje subterráneo. Los vehículos estacionados sufrieron daños considerables, algunos quedando prácticamente sepultados bajo escombros. Las imágenes del garaje inundado y los autos dañados son impactantes y muestran la magnitud del suceso.

Bomberos de la Ciudad, junto con la Unidad K9 (con perros de rescate), la Guardia de Auxilio, Metrogas y Edesur, respondieron rápidamente al incidente. La presencia de la Unidad K9 subraya la preocupación inicial por la posibilidad de víctimas atrapadas. Afortunadamente, no se reportaron heridos de gravedad ni víctimas fatales, aunque la evacuación de un número tan elevado de personas en medio de la noche subraya el potencial riesgo.

La evacuación se complicó por la presencia de dos residentes con hipoacusia en los pisos 12 y 13, quienes no percibieron el estallido. Los bomberos tuvieron que localizarlos y ayudarlos a descender de forma segura. Además, se registró un caso de una mujer mayor que se resistía a abandonar su departamento y necesitó de la intervención de los rescatistas.

El comandante Diego Coria, del cuerpo de bomberos de la Ciudad, informó que las columnas del edificio están en buen estado y no hay riesgo de derrumbe, si bien se produjo un desplazamiento de una pared. Metrogas cortó el suministro de gas, y Edesur verificó que las cámaras de electricidad no sufrieron daños. Sin embargo, la causa precisa del estallido aún se está investigando. Las autoridades no permitieron el regreso de los vecinos hasta que se completara una evaluación estructural exhaustiva del edificio.

El testimonio de los vecinos resalta la angustia y el miedo vividos. Algunos describieron la explosión como una “bomba”, mientras que otros enfatizaron la falta de información sobre cuándo podrían regresar a sus hogares y la situación de incertidumbre ante la pérdida de sus pertenencias. La experiencia subraya la vulnerabilidad de los residentes ante este tipo de eventos inesperados.

Este incidente en Recoleta sirve como un recordatorio crucial sobre la importancia del mantenimiento regular de las instalaciones de gas y las calderas en edificios, especialmente en estructuras antiguas. Las inspecciones preventivas y el cumplimiento de las normas de seguridad son vitales para evitar tragedias futuras.

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