El martes pasado, Mallorca fue el escenario de una sesión fotográfica protagonizada por Kanye West y su esposa, Bianca Censori, junto a la hermana de esta última. Las imágenes, compartidas en la plataforma X, muestran a Censori, de 30 años, con un ajustado body de cuero que dejaba muy poco a la imaginación, mientras que su hermana, Angela, de 29 años, vestía un atuendo similar, aunque algo más recatado. West, de 47 años, se mostraba cercano a su esposa, interactuando con ella de manera que algunos calificaron como una demostración pública de afecto. La secuencia, capturada en video, muestra a Censori acercándose a un escenario y a West ayudándola a subir. En un momento que se ha viralizado, Censori parece sentarse brevemente sobre West antes de incorporarse. Posteriormente, la pareja se retira del escenario con West manteniendo su mano en la espalda baja de Censori. La escena ha generado un gran revuelo en las redes sociales, dividiendo opiniones entre quienes la consideran una expresión artística y quienes la califican como una provocación excesiva. La privacidad de la pareja y el uso de imágenes íntimas en un contexto público son puntos de discusión recurrentes. La controversia se agudiza considerando las letras de la reciente canción de West "Heil Hitler (Hooligan Version)", donde se refiere a Censori en términos explícitos, y su autodescripción como "cuck" (cornudo), haciendo referencia a la infidelidad. La canción ha sido retirada de varias plataformas por su contenido ofensivo. Este hecho pone en un contexto aún más complejo la sesión fotográfica en Mallorca, planteando interrogantes sobre la imagen pública que West y Censori buscan proyectar. La situación en Mallorca también añade otro capítulo a la historia de controversias que envuelven a Kanye West. Su fortuna, estimada en $2.15 mil millones según Forbes (muy por debajo de los $6.6 mil millones previos a la pérdida de sus asociaciones con Adidas, Gap y Balenciaga), y sus problemas fiscales, con deudas pendientes por cientos de miles de dólares en impuestos sobre sus propiedades, añaden un trasfondo económico y legal a este reciente suceso. La acumulación de controversias plantea dudas sobre la imagen y el futuro del artista.