“Ahí viene algo grande”: Lewis Holtby, con esta frase (citada por la SID), antes del último partido de Bundesliga de su carrera, no solo hizo una acertada predicción del duelo entre Kiel y Borussia Dortmund. Si dispusiera de una máquina del tiempo, esta frase también sería un buen consejo para su yo de 17 años.
El joven Lewis Holtby probablemente habría dicho lo mismo si alguien le hubiera mostrado su futuro en una bola de cristal: “Me espera algo grande”. Entre descensos, ascensos, Champions League, Premier League y el fango de la segunda división inglesa, Lewis Holtby ha experimentado una montaña rusa de emociones, sin ser recompensado con un título.
Un recorrido en imágenes:
Su carrera profesional comienza en el Borussia Dortmund, con su debut a los 17 años en 2007. En la temporada 2008/09 logra un gran avance con 17 puntos en la segunda división, atrayendo la atención de toda la Bundesliga.
En el verano de 2009, Holtby toma una de sus primeras decisiones difíciles: se muda al Schalke 04, dirigido entonces por Felix Magath. En Schalke, sin embargo, no logra imponerse ante jugadores como Jermaine Jones e Ivan Rakitić, y juega principalmente desde el banquillo. En invierno, se decide cederlo a otro club.
Holtby se va al Bochum, juega, pero el VfL desciende al final de la temporada. No será su primer descenso.
De vuelta en Gelsenkirchen, en el verano de 2010, es cedido al Mainz, dirigido por Thomas Tuchel. Aquí celebra su primer gran éxito: los legendarios “Bruchwegboys” consiguen clasificarse para Europa.
De regreso al Schalke, gana su único título: la Supercopa contra el Borussia Dortmund.
En Schalke finalmente se convierte en jugador titular, clasifica al club para la Champions League y recibe una experiencia inolvidable: un abrazo de Raúl.
En enero de 2013, se muda a Inglaterra para jugar en el Tottenham Hotspur. Sin títulos, pero con otro abrazo de estrella mundial.
Su siguiente paso, al Fulham, le trae un nuevo descenso y la frustración de perderse la Copa Mundial de 2014.
Después de Fulham, se une al Hamburgo SV. Dos exitosas luchas por la permanencia, seguidas de un descenso, su tercer descenso en su carrera.
Después del descenso con el Hamburgo, juega en el Blackburn Rovers, y finalmente en el Holstein Kiel, con el que logra ascender a Bundesliga, para luego descender otra vez.
Ahora, se enfrenta a su probablemente último partido de Bundesliga. A pesar de los altibajos, Holtby declara al ‘kicker’: “Seguiré jugando. Quiero disfrutar mientras mi cuerpo me lo permita.” En otras palabras: aún le queda mucho por vivir.
Su carrera es un ejemplo de perseverancia y pasión por el fútbol, una montaña rusa sin títulos, pero llena de experiencias y anécdotas inolvidables. Una carrera que, incluso en su ocaso, sigue ofreciendo sorpresas.