El entrenador del Manchester United, Rúben Amorim, declara que ganar la final de la Europa League es crucial para la temporada, admitiendo la decepcionante actuación en la Premier League y la presión sobre su puesto.
Tras la victoria arrolladora del Manchester United sobre el Athletic Club (4-1) en las semifinales de la Europa League, el entrenador Rúben Amorim ha dejado claro que el título es su única prioridad. En declaraciones a TNT Sports, Amorim declaró: "Si no ganamos la final, esto no significa nada". Esta contundente afirmación refleja la presión que siente el técnico portugués, cuya posición en el club podría depender del resultado de la final. La temporada del Manchester United en la Premier League ha sido decepcionante, con el equipo luchando en la zona media de la tabla. Este bajo rendimiento contrasta con la excelente trayectoria en la Europa League, lo que genera una situación compleja para Amorim. El entrenador reconoce la dificultad de su situación: "Somos casos parecidos. Es un momento difícil para los dos (él y Ange Postecoglou del Tottenham) y uno de los dos va a ganar. Va a ser una gran final y vamos a tratar de ganar". Amorim destaca la importancia de llegar a la final con todos sus jugadores disponibles y en óptimas condiciones, reconociendo la necesidad de un poco de suerte y acierto para lograr la victoria. No obstante, también subraya la importancia de la victoria para el club y para los aficionados: "Es difícil explicar lo que significa entrenar a este club, pero le queremos dar algo a los aficionados porque hemos estado fatal en la Premier League". La victoria en la Europa League se presenta como una oportunidad para redimir la temporada y para asegurar la clasificación para la Champions League la próxima temporada, algo que el jugador argentino Alejandro Garnacho también ha manifestado como objetivo prioritario. La situación del Manchester United es crítica. Una victoria en la final de la Europa League podría salvar la temporada, mientras que una derrota podría tener consecuencias significativas para el futuro del club y para el mismo Amorim. La presión está puesta, y la final de la Europa League se presenta como un partido crucial para definir el futuro inmediato del equipo.