Analizamos la compleja situación de los equipos de la Liga Profesional de Fútbol Argentina en la lucha por evitar el descenso, tanto por la tabla anual como por la de promedios. Un panorama tenso con varios equipos en riesgo.
La Liga Profesional de Fútbol Argentina se encuentra en un punto crucial de la temporada. Si bien aún restan partidos por disputarse en el Apertura y el Clausura, la sombra del descenso planea sobre varios equipos, generando una intensa lucha por la permanencia. Dos tablas definen el destino de los clubes: la tabla anual y la tabla de promedios, cada una con un descenso directo.
**La Tabla Anual: Una carrera contra el tiempo**
La tabla anual suma los puntos obtenidos en las 32 fechas de la temporada regular (16 del Apertura y 16 del Clausura). Los playoffs no se contabilizan. El equipo que menos puntos acumule al finalizar la temporada descenderá directamente a la Primera Nacional. La situación es crítica para equipos como San Martín de San Juan, actualmente último con escasas unidades. Pero la cercanía en la tabla implica que otros equipos con pocos puntos más, como Aldosivi, Gimnasia, Unión, Atlético Tucumán y Talleres, también se encuentran en zona de peligro y deben luchar por sumar puntos en cada partido.
La pelea no solo se centra en la simple sumatoria de puntos, sino también en la diferencia de gol. Esta puede ser determinante para definir la posición final en caso de igualdad de puntos.
**La Tabla de Promedios: Un cálculo implacable**
La tabla de promedios toma en cuenta los resultados de las últimas tres temporadas (2023, 2024 y 2025) para la mayoría de los equipos. Se calcula un coeficiente dividiendo los puntos obtenidos por la cantidad de partidos jugados. El equipo con el coeficiente más bajo al final de la temporada desciende. San Martín de San Juan también se encuentra en una situación delicada en esta tabla, ocupando el último lugar con un coeficiente preocupantemente bajo. Aldosivi y Sarmiento le siguen de cerca, mostrando una situación precaria para estos equipos también. La presión es máxima, ya que un mal resultado podría complicar aún más sus posibilidades de permanencia.
**Las implicancias para los equipos**
La presión en ambas tablas es enorme. La lucha por evitar el descenso no solo implica mantener la categoría, sino también conservar la inversión realizada y la estabilidad del club. Cada punto se convierte en un objetivo vital, generando una alta tensión en cada partido. Los entrenadores deben implementar estrategias para asegurar la mayor cantidad de puntos, mientras que la afición espera con ansiedad la evolución de sus equipos en la pelea por mantenerse en la máxima categoría del fútbol argentino.
**El fantasma de la anulación de descensos**
Es importante mencionar que en las últimas dos temporadas se anularon los descensos, generando una incertidumbre sobre la aplicación estricta del reglamento en la presente temporada. Esta situación añade una capa extra de complejidad y presión a la competición, ya que los equipos no pueden saber con certeza si al final de la temporada se respetarán los descensos por tabla anual y por promedios o no. Esta incertidumbre genera una gran especulación e impacta en el desarrollo del campeonato.
**Conclusión:**
La lucha por evitar el descenso en la Liga Profesional Argentina es una batalla intensa y compleja. La combinación de la tabla anual y la tabla de promedios genera un clima de alta tensión, con varios equipos en riesgo de descenso. La aplicación del reglamento y el desarrollo de los próximos partidos serán claves para definir el futuro de estos clubes en la máxima categoría del fútbol argentino.