La derrota del Sevilla FC en El Sadar por 1-0 ante Osasuna ha generado una gran controversia, principalmente debido a la expulsión de Dodi Lukebakio en la primera mitad. El entrenador sevillista, Joaquín Caparrós, no dudó en expresar su indignación, afirmando que se marcharon de Pamplona "con cara de bobos". Caparrós centró sus críticas en la actuación arbitral, señalando la expulsión de Lukebakio como un punto de inflexión que condicionó el desarrollo del partido. Consideró que la decisión del árbitro fue injusta y cuestionó si la misma acción se hubiera sancionado de igual manera en una final como la que enfrentará al Barcelona y al Real Madrid. A pesar de reconocer el buen juego del equipo, la inferioridad numérica durante gran parte del encuentro imposibilitó la remontada. La polémica no se limita a la expulsión de Lukebakio. El Sevilla FC acumula varias jornadas con decisiones arbitrales que, según el club, les han perjudicado. Se mencionan, como ejemplos, la anulación de dos goles en el partido contra el Valencia y la falta de penalti señalada sobre Pedrosa en el encuentro frente al Rayo Vallecano. Estas situaciones han generado malestar dentro del club y en la afición sevillista, que reclaman mayor justicia en los arbitrajes. El club ya ha anunciado que recurrirá la expulsión de Lukebakio, aunque las posibilidades de éxito son escasas. De confirmarse la sanción, el extremo se perderá el próximo partido ante el Leganés. La situación es crítica para el Sevilla FC, que se encuentra a cinco puntos de la zona de descenso, lo que aumenta la presión para conseguir resultados positivos en las próximas jornadas. La próxima cita en casa contra el Girona representa una oportunidad vital para cambiar la dinámica y sumar tres puntos cruciales. Caparrós, a pesar de la amargura por la derrota, también destacó el ambiente del estadio de El Sadar y la buena interpretación de su equipo a pesar de las adversidades. Enfatizó la necesidad de romper la mala racha y recuperar la confianza para afrontar los partidos restantes con la convicción necesaria para lograr la salvación. La indignación de Caparrós, la serie de controversias arbitrales y la situación crítica en la tabla, convierten la situación del Sevilla FC en un asunto que genera debate y expectativa en el mundo del fútbol.