El Gran Premio de Arabia Saudita de Fórmula 1 2025 no solo estuvo marcado por la emocionante clasificación y la carrera posterior, sino también por un comentario polémico del ex piloto y comentarista Martin Brundle. Durante la transmisión de Sky Sports, Brundle sugirió que Jack Doohan, piloto de Alpine, debería haber realizado un 'brake test' (prueba de frenos) contra Fernando Alonso de Aston Martin durante la Q1. Esta maniobra, que consiste en frenar bruscamente y sin motivo para obstaculizar al piloto que viene detrás, es considerada extremadamente peligrosa y antideportiva, sujeta a severas sanciones por parte de la FIA. La sugerencia de Brundle, emitida en vivo, causó un amplio rechazo entre la audiencia y los expertos, generando un debate sobre la responsabilidad de los comentaristas al analizar las acciones de los pilotos. El incidente ocurrió en la recta principal, cuando Alonso aprovechó el rebufo de Doohan para mejorar su tiempo. Brundle, en su comentario, afirmó: "Si yo fuese Jack (Doohan), le haría un brake test a Alonso". Esta declaración no solo fue considerada inapropiada, sino que también se interpretó como un llamado a una acción que podría haber tenido consecuencias graves para la seguridad de ambos pilotos. La acción de Alonso, aunque aprovechando el rebufo, fue considerada legal y dentro de las reglas del deporte. Doohan, por su parte, no realizó ninguna maniobra que pudiera ser considerada antideportiva, lo cual fue el foco de la crítica de Brundle. La sugerencia del comentarista contrasta con la naturaleza justa y limpia del deporte, destacando la importancia de la deportividad y la seguridad por encima de cualquier estrategia agresiva. La controversia resalta la línea delgada entre el análisis crítico y la incitación a acciones peligrosas en un deporte de alta velocidad como la Fórmula 1. La experiencia de Brundle como ex piloto añade peso a sus declaraciones, pero también exige una mayor responsabilidad en sus comentarios. Se espera un mayor grado de prudencia y objetividad de la parte de los comentaristas, evitando expresiones que puedan incitar a maniobras antideportivas o peligrosas para los competidores. El caso recuerda otros incidentes similares, como el 'brake test' de Max Verstappen contra Lewis Hamilton en el mismo circuito en 2021, que provocó una ola de controversias y sanciones. La sugerencia de Brundle, por lo tanto, no sólo fue criticada por su inapropiación, sino también por su potencial para normalizar conductas arriesgadas en un deporte donde la seguridad de los pilotos es primordial. En resumen, la crítica de Brundle a Doohan por no haber realizado una acción antideportiva ha desatado un debate sobre la responsabilidad en la cobertura mediática de la Fórmula 1 y la importancia de promover la deportividad y la seguridad por encima de cualquier estrategia cuestionable. El incidente sirve como un recordatorio de las consecuencias que pueden tener las declaraciones públicas, especialmente en un deporte con tanta audiencia y seguimiento global.