Rosario Central se encuentra en una excelente posición para finalizar la fase de grupos del torneo Apertura como líder. Analizamos su situación, las claves de su éxito y los desafíos que le esperan para asegurar el primer puesto.
Tras el empate ante Platense, Rosario Central tiene el control de su propio destino en la lucha por el liderazgo de la zona B del torneo Apertura. La campaña del Canalla ha sido destacable hasta el momento, con una clasificación a octavos de final asegurada cuatro fechas antes de finalizar la etapa regular. Este logro es aún más impresionante considerando el difícil calendario que enfrentaron, con ocho de sus trece partidos disputados como visitantes.
El punto obtenido ante Platense resultó crucial, ya que impidió que Independiente se escapara a tres puntos de diferencia. Aunque el empate no reflejó el mejor juego del equipo, la solidez defensiva y la efectividad en momentos claves demostraron la madurez del equipo de Ariel Holan. El resultado mantiene a Central con la posibilidad de definir en casa hasta la final, una gran ventaja deportiva.
Con tres partidos restantes, la meta de Rosario Central es clara: ganarlos todos para asegurar el primer puesto, independientemente del desempeño de Independiente. Si bien los próximos rivales (Instituto, San Lorenzo e Independiente) presentarán un desafío importante, la ventaja actual de Central reside en la dependencia de sí mismo para lograr el objetivo. La diferencia de gol también juega un papel crucial; mientras Central tiene +9, Independiente goza de +14, por lo que mantener una buena diferencia de goles es esencial.
El desafío es aún mayor considerando que uno de los rivales a enfrentar es el propio Independiente. En este contexto, los resultados de Independiente frente a Atlético Tucumán y Deportivo Riestra, así como el rendimiento de San Lorenzo, serán factores clave a monitorear. Además, Independiente tendrá el compromiso adicional de la Copa Sudamericana, lo que podría generar un mayor desgaste físico en el equipo.
Si bien Central no está exento de problemas, con algunos jugadores lesionados o suspendidos (como el caso de Ignacio Malcorra, con cinco tarjetas amarillas), la experiencia y la estrategia de Holan serán fundamentales para superar los obstáculos y maximizar las posibilidades del equipo. Las bajas físicas y la búsqueda del mejor reemplazante para Malcorra son desafíos adicionales que el cuerpo técnico deberá gestionar.
En resumen, la posición actual de Central es privilegiada. Depende de sí mismo para culminar la fase de grupos como líder, consolidando una temporada exitosa y asegurando una importante ventaja de localía para las instancias decisivas del torneo. Los próximos tres partidos serán una prueba decisiva de la capacidad y resiliencia del equipo, para culminar este tramo del torneo de la mejor manera posible.