El cuerpo de Agustín Ovando, de 4 años, fue encontrado este viernes en el río Paraná, cerca de Reconquista, Santa Fe. Continúa la búsqueda de su padre, Pablo Ovando, quien desapareció junto a él el martes pasado.
La conmoción sacude a Reconquista, Santa Fe, tras el hallazgo del cuerpo sin vida de Agustín Ovando, el niño de 4 años que había desaparecido junto a su padre, Pablo Ovando, mientras navegaban por el río Paraná. El cuerpo del pequeño fue encontrado este viernes por efectivos de Prefectura Naval Argentina en el kilómetro 957 del río, cerca de Puerto Reconquista. La noticia llega luego de intensos días de búsqueda, con un despliegue masivo de recursos que incluyó buzos, embarcaciones, drones y aviones. A pesar del hallazgo del cuerpo de Agustín, el operativo de búsqueda continúa activo para localizar a su padre, Pablo Ovando, de 44 años, quien continúa desaparecido.
Según informaron fuentes oficiales, una embarcación alertó a Prefectura Naval sobre la presencia de un cuerpo sin vida en el río. Los agentes acudieron al lugar y recuperaron el cuerpo, trasladándolo a la zona del largadero Molina para su identificación. El fiscal Norberto Ríos, del Ministerio Público de la Acusación de Santa Fe, confirmó la identidad del niño, quien habría cumplido cuatro años el día anterior al hallazgo. El cuerpo fue entregado a la Policía de Santa Fe para la realización de la autopsia.
La desaparición se produjo el martes pasado, cuando Pablo y Agustín salieron a navegar desde Puerto Reconquista a bordo de su embarcación, la “WALLY”, con matrícula REY-020999. Tenían previsto regresar el miércoles, pero nunca lo hicieron. La preocupación creció cuando no hubo noticias de ambos durante la noche. Al día siguiente, el yate fue encontrado anclado en inmediaciones del riacho San Jerónimo, sin rastros de los tripulantes. Los chalecos salvavidas se encontraban dentro de la embarcación, lo que inicialmente alimentó la hipótesis de un accidente. El teléfono celular de Pablo fue hallado en su camioneta, estacionada en el puerto, sin signos de violencia.
La madre de Pablo, María Luisa Siligoy, indicó que el último contacto con la familia fue el martes a las 14:30. La noticia de la desaparición generó conmoción en Reconquista, donde Pablo era conocido por su trabajo como guía de pesca. Las autoridades destacaron que Ovando conocía en detalle la geografía del río. El operativo de búsqueda involucró a Prefectura Naval, buzos, embarcaciones, drones, y la colaboración de amigos, conocidos y colegas de Ovando, así como del intendente de Reconquista.
Las tareas de rastrillaje se concentraron en el kilómetro 960 del río Paraná, en el Riacho Correntoso. La Policía de Investigaciones de Santa Fe no encontró signos de violencia en la embarcación, lo que reforzó la hipótesis inicial de una caída accidental al agua. Con el hallazgo del cuerpo del niño, la investigación toma un nuevo giro, pero el Ministerio de Seguridad de la Nación mantiene todos los recursos desplegados para la búsqueda del padre. La Fiscalía a cargo de Ríos continuará con las tareas de búsqueda hasta dar con el paradero de Pablo Ovando. Por el momento, no hay indicios de la participación de terceras personas en los hechos.