Un hombre de 38 años murió por hantavirus en San Martín de los Andes, Neuquén, generando alerta sanitaria y el aislamiento de 10 contactos estrechos. Se analiza la fuente de contagio y se recomiendan medidas preventivas.
En la tranquila localidad turística de San Martín de los Andes, provincia de Neuquén, la tranquilidad se vio interrumpida por la trágica noticia del fallecimiento de un hombre de 38 años a causa del hantavirus. Este evento ha activado una alerta sanitaria en la región, con la consecuente investigación epidemiológica y el aislamiento de diez personas que tuvieron contacto cercano con la víctima.
El hombre, identificado como Oscar Fabián Tripailaf, presentó los primeros síntomas el 8 de abril, ingresando al Hospital Ramón Carrillo con un cuadro compatible con hantavirus. A pesar de los esfuerzos médicos, su estado empeoró rápidamente, causando su muerte horas después. Las autoridades sanitarias provinciales confirmaron el caso y están trabajando activamente para determinar la fuente de contagio, un aspecto crucial dado que Tripailaf había realizado diversas actividades durante el período de incubación, que se extiende entre una y seis semanas.
La investigación se centra en identificar el lugar y la forma de exposición al virus, ya que si bien el ratón colilargo es el principal vector en la Patagonia, aún no se ha confirmado un contacto directo en este caso particular. La posibilidad de contagio aéreo, a través de la inhalación de partículas contaminadas con orina, heces o saliva de roedores infectados, también está bajo investigación. La transmisión persona a persona es menos común, aunque no se descarta en este caso.
Las autoridades sanitarias han aislado a diez personas que estuvieron en contacto cercano con el fallecido. Estas personas se encuentran bajo automonitoreo de síntomas y reciben apoyo del servicio de salud. Este caso representa un desafío particular por su letalidad, requiriendo un acompañamiento especial para la familia en duelo.
El hantavirus es una enfermedad viral aguda grave, con diferentes cepas según la región. En la Patagonia andina, la cepa Andes es la más común, y se caracteriza por su potencial de transmisión entre humanos, a diferencia de otras cepas. En su forma más severa, puede causar el síndrome pulmonar por hantavirus (SCPH), una infección respiratoria grave que puede provocar insuficiencia respiratoria aguda, con una tasa de mortalidad que fluctúa entre el 30% y el 50%, dependiendo de varios factores.
Los síntomas iniciales suelen incluir fiebre alta, dolores musculares, náuseas, vómitos, dolor abdominal y, en algunos casos, dificultad respiratoria. La rápida detección y el tratamiento son fundamentales para mejorar el pronóstico. Ante la presencia de estos síntomas, especialmente en personas que han estado expuestas a zonas rurales o suburbanas, se recomienda la consulta médica inmediata.
El Ministerio de Salud de Neuquén ha recomendado extremar los cuidados, especialmente en áreas rurales o de campamento, insistiendo en la ventilación de espacios cerrados antes de ingresar, la eliminación de basura y alimentos que puedan atraer roedores, y la evitación de la acumulación de objetos que puedan servir de refugio para estos animales.
Este caso en Neuquén se suma a otros recientes en la región, como la muerte de una mujer en Bariloche y la hospitalización de un hombre en Salta, lo que subraya la importancia de la prevención y la alerta sobre la presencia del hantavirus en diferentes zonas del país. La investigación continúa para evitar nuevos contagios y mitigar el impacto de esta enfermedad.