Tras más de seis años de ausencia, la barra brava de River Plate, Los Borrachos del Tablón, regresó al Estadio Monumental en el partido contra Talleres. Descubre los detalles de su vuelta, el significado para los hinchas y las implicaciones para el futuro.
El Estadio Monumental vibró con un regreso esperado por miles: después de más de seis años, Los Borrachos del Tablón volvieron a las tribunas de River Plate. Su reaparición en el partido contra Talleres de Córdoba por la fecha 13 del Torneo Apertura marcó un hito para la hinchada millonaria y generó un debate sobre la seguridad y la cultura del fútbol argentino.
La última vez que la barra se hizo presente en el Monumental fue el 2 de diciembre de 2018, en un triunfo 3-1 ante Gimnasia La Plata, días previos a la final de la Copa Libertadores contra Boca Juniors en Madrid. Desde entonces, una prohibición de ingreso al estadio, impuesta tras incidentes previos, mantuvo a Los Borrachos del Tablón lejos del aliento directo en Núñez. Si bien algunos integrantes habían participado en partidos de Copa Argentina y superclásicos disputados fuera de Buenos Aires, su retorno a la cancha de River era un evento ansiado por muchos hinchas.
Esta vez, el regreso fue parcial. Si bien los líderes de la barra siguen con derecho de admisión, se permitió el ingreso de bombos, tirantes y banderas (sin leyendas de LBDT como condición), ubicados en la Sívori baja inferior, la nueva popular luego de las remodelaciones del estadio. La presencia de estos elementos representó la vuelta del colorido y el sonido característico de la barra, generando una atmósfera festiva en el partido. El evento se considera un paso significativo, especialmente con el superclásico contra Boca Juniors en el horizonte.
La decisión del club de permitir este regreso parcial ha sido objeto de debate. El presidente de River Plate, Jorge Brito, había manifestado en entrevistas previas su creencia en las segundas oportunidades, aunque aclarando la necesidad de abordar el problema de la violencia y el derecho de admisión de manera integral. Esta acción podría interpretarse como una concesión, buscando recuperar la tradición y el clima festivo en el estadio, pero también como una apuesta arriesgada con posibles consecuencias negativas.
La vuelta de Los Borrachos del Tablón al Monumental generó diversas reacciones. Algunos hinchas celebraron el retorno de la tradicional fiesta en las tribunas, mientras que otros expresaron preocupación por la posibilidad de reavivar la violencia. La presencia de una mayor seguridad en el sector y las medidas impuestas para el ingreso de banderas y elementos de percusión indican una postura cautelosa por parte de la institución, buscando un equilibrio entre la tradición y la seguridad. El futuro de la relación entre el club y su barra brava queda en un punto intermedio, sujeto a la evolución de los acontecimientos en las próximas fechas y la eficacia de las medidas de control implementadas.