Amalia Granata desempolva un viejo romance de Wanda Nara con el futbolista Cristian 'Ogro' Fabbiani, recordando detalles de una relación breve pero intensa en 2007, antes de la fama internacional de la empresaria.
En 2025, un recuerdo del pasado resurge inesperadamente. Amalia Granata, en una aparición televisiva en LAM, confirmó un romance casi olvidado entre Wanda Nara y Cristian 'Ogro' Fabbiani, ocurrido en 2007. Este breve pero intenso vínculo, que data de los inicios de ambas figuras en el mundo del espectáculo, ha vuelto a la luz gracias a la revelación de Granata.
La historia se remonta a un Buenos Aires vibrante, lleno de luces y rumores. Wanda Nara, aún sin la fama internacional que la caracteriza hoy, se destacaba en 'Patinando por un Sueño', mientras que el Ogro Fabbiani, delantero de Lanús, era una figura mediática por su carisma y vida nocturna. Su encuentro, retratado por las cámaras en una cena en Puerto Madero, dio pie a una relación fugaz.
Las declaraciones contradictorias de la pareja, entre desmentidos y confesiones ambiguas, alimentaban la atención mediática. Mientras Wanda, con su espontaneidad característica de la época, afirmaba que "le pegaría si lo veía con otra", Fabbiani respondía con evasivas y bromas acerca de su memoria.
La efímera relación, cargada de pasión, llegó a su fin con acusaciones de hostigamiento por parte de Wanda, quien denunció llamadas insistentes y mensajes que traspasaban los límites de lo romántico. Incluso llegó a recibir un teléfono nuevo del futbolista para que la contactara. Este final abrupto, dejando una marca imborrable en el recuerdo.
El testimonio de Amalia Granata, que conocía a ambos en ese entonces, proporciona una nueva perspectiva sobre esta historia casi olvidada, revitalizando el interés público en un romance que precedió a las relaciones mediáticas posteriores de Wanda con Maxi López y Mauro Icardi. El pasado vuelve a la vida, resucitando una época de la farándula argentina que marcó un antes y un después en la carrera de ambas celebridades. La revelación de Granata no solo confirma el romance sino que también resalta el impacto duradero de la época en la vida de estas figuras públicas.
La historia, narrada con humor y nostalgia por Granata, rescata un capítulo casi perdido de la vida mediática de Wanda Nara, mostrando una faceta menos conocida, antes de sus escándalos internacionales y su imperio mediático. El romance con el Ogro Fabbiani sirve como un recordatorio de la evolución de la imagen pública de Wanda y del impacto que tuvieron los medios en su vida desde sus inicios en la farándula.