El encuentro entre Boca Juniors y Newell's Old Boys se presenta como un desafío crucial para el equipo xeneize, que busca afianzar su posición en la tabla de posiciones. Fernando Gago, entrenador de Boca, sorprendió a propios y extraños con la alineación elegida para este importante partido, dejando de lado a algunos jugadores clave y dando la oportunidad a otros. Una de las novedades más destacadas es el regreso de Alan Velasco al once titular. El joven atacante, refuerzo estrella del club, vuelve a la cancha tras la eliminación de la Copa Libertadores, donde erró un penal decisivo. Su inclusión representa una apuesta ofensiva importante por parte de Gago, quien busca aprovechar al máximo su talento. Velasco reemplazará a Carlos Palacios, quien quedó fuera de la convocatoria por su ausencia injustificada en un entrenamiento. Sin embargo, la principal sorpresa la dio la ausencia de Ander Herrera en el once inicial. A pesar de haber entrenado a la par de sus compañeros durante toda la semana, el mediocampista español comenzará el partido desde el banco de suplentes. Esta decisión, tomada por el mismo Gago, abre interrogantes sobre las razones tácticas detrás de su exclusión y las posibles consecuencias en el juego de Boca. Otro cambio obligado se da en el mediocampo, donde Tomás Belmonte ocupará el lugar del lesionado Williams Alarcón. El cambio ya se realizó en el partido anterior, en el cual Alarcón sufrió la lesión de sus meniscos. Esta modificación, aunque esperada, mantiene la estructura táctica del equipo. En la defensa, Lautaro Di Lollo mantiene su lugar en el equipo, dejando en el banco de suplentes a Rodrigo Battaglia, quien se perfilaba como una posible opción. En resumen, el once titular de Boca para enfrentar a Newell's es: Agustín Marchesín; Lucas Blondel, Lautaro Di Lollo, Marcos Rojo, Lautaro Blanco; Tomás Belmonte, Milton Delgado, Kevin Zenón; Alan Velasco; Edinson Cavani y Milton Giménez. El partido se presenta como una oportunidad clave para Boca, que de obtener un buen resultado en Rosario, se alejaría de los puestos bajos de la tabla y se acercaría a la posibilidad de definir el torneo en su propia casa. La ausencia de Herrera y el regreso de Velasco marcan una estrategia arriesgada pero con potencial para un resultado positivo. La presión sobre los jugadores titulares es alta, especialmente sobre Velasco, quien deberá demostrar que está listo para asumir la responsabilidad y liderar el ataque.