El Club Deportivo Godoy Cruz Antonio Tomba se encuentra en medio de una profunda crisis tras un incidente que involucra a tres jugadores del plantel principal y al entrenador Esteban Solari. Según fuentes cercanas al club, al finalizar un entrenamiento, tres jugadores -un arquero, un mediocampista extranjero y un extremo- intentaron agredir físicamente a Solari. La razón, al parecer, es la insatisfacción con el planteo táctico del entrenador y el bajo rendimiento del equipo en el Torneo Apertura de la Liga Profesional. Los jugadores, frustrados por los resultados y sin entender la estrategia implementada, confrontaron a Solari con intenciones de violencia física, un hecho que fue impedido por la intervención de otros compañeros. Uno de los jugadores, identificado como un referente extranjero del equipo, llegó a culpar directamente a Solari por la situación actual del club, sugiriendo incluso que debería dirigir la reserva. Este acto de indisciplina grave refleja un ambiente tenso y dividido dentro del vestuario del Expreso. El incidente ocurrió en un momento crítico para el equipo, a pocos días del clásico mendocino frente a Independiente Rivadavia. La situación ha generado una gran preocupación en la dirigencia, aunque hasta el momento no se ha emitido un comunicado oficial. La información ha sido confirmada por fuentes dentro del club, aunque la dirigencia aún no se ha pronunciado públicamente. Se espera que en las próximas horas emitan un comunicado oficial para aclarar la situación y anunciar las posibles sanciones que se aplicarán. Si bien una versión desmentida por Olé indica que sólo se trató de la baja de un arquero suplente por faltas a entrenamientos, la gravedad de los hechos relatados por otras fuentes no puede ser descartada. El clima tenso se suma a la irregularidad deportiva del Tomba, que aún no ha podido conseguir una victoria como local. Aunque cuenta con dos triunfos como visitante y cinco empates, el equipo acumula siete partidos sin derrotas, una racha que no esconde los problemas de juego. El desafío ahora es doble: recuperar la armonía interna y mejorar el rendimiento en la cancha para afrontar el importante encuentro contra Independiente Rivadavia. El clásico se disputará el sábado 5 de abril a las 15.30 horas en el estadio Malvinas Argentinas, bajo un ambiente enrarecido por esta grave crisis interna. El futuro del entrenador y los involucrados en el incidente permanece incierto, generando una gran expectativa por las medidas que la dirigencia tomará en las próximas horas y días. Este suceso pone de manifiesto la fragilidad interna de Godoy Cruz y plantea interrogantes sobre la capacidad de Solari para mantener el control del vestuario y llevar al equipo hacia los objetivos de la temporada. La falta de un comunicado oficial por parte de la dirigencia genera mayor incertidumbre y especulación sobre el alcance del conflicto.