Hauque y su pareja revelan detalles impactantes sobre la noche de la detención: un complot con Piccirillo y la posible implicación de Jesica Cirio

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Francisco Hauque y Anahí Aquino Laprida, denunciantes de Elías Piccirillo, esposo de Jesica Cirio, detallan la noche en que fueron detenidos, describiendo una emboscada con drogas y armas plantadas, y apuntando a una posible participación de la modelo.

El caso que involucra al empresario Francisco Hauque, su esposa Anahí Aquino Laprida y Elías Piccirillo, marido de la modelo Jesica Cirio, tomó un giro inesperado con el testimonio de la pareja. Hauque y Aquino relataron con lujo de detalles la noche del 17 de enero, cuando fueron detenidos por la policía de la Ciudad de Buenos Aires, acusados de tráfico de estupefacientes y portación de armas. Su versión, sin embargo, apunta a una compleja trama de engaño orquestada por Piccirillo. Según la pareja, Piccirillo, con quien tenían una deuda millonaria pendiente, los invitó a cenar al Palacio Duhau con el objetivo de negociar el pago. Hauque describe cómo Piccirillo, en una llamativa actitud, se sentó inicialmente en la parte trasera del vehículo, para luego, a mitad de camino, cambiar de lugar e invitar a Aquino a sentarse atrás. Es en este punto que Aquino relata cómo Piccirillo la miraba insistentemente, en lo que la pareja interpreta como una estrategia de distracción mientras supuestamente colocaba un arma y drogas debajo del asiento del conductor. En el restaurante, Piccirillo insistió en que Cirio se uniría a la cena, pero luego, sorpresivamente, informó que su esposa estaba indispuesta y no asistiría. Esto, según Hauque y Aquino, refuerza su sospecha de que la situación había sido orquestada. La comida reservada para Cirio, según el relato, ya estaba puesta en la mesa cuando llegaron. La pareja indica que la cena transcurrió con normalidad, acordando un plan de pagos para la deuda. Sin embargo, al salir del restaurante, un operativo policial detuvo a la pareja. Los policías, de civil, los interceptaron a los pocos metros, argumentando una supuesta situación de violencia de género, aunque sin ninguna evidencia aparente, ya que los vidrios polarizados del vehículo impedían la visibilidad desde el exterior. Hauque y Aquino denuncian que fueron tratados de manera violenta durante la detención, y que las drogas fueron “casualmente” halladas en el baúl del auto, mientras varios oficiales lo obstruían de la vista. El abogado de la pareja, Carlos Pousa, destaca la inconsistencia de la versión policial y menciona la posibilidad de un soborno o arreglos con la justicia por parte de Piccirillo. Además, el abogado y la pareja no descartan la participación de Jesica Cirio, diciendo que al menos estaría al tanto de la situación, generando sospechas sobre su complicidad. “Ella podría ponerle fin a este tema presentándose a declarar,” afirma Pousa. Hauque y Aquino sostienen que Piccirillo intentó usar este operativo falso para eliminarlos como testigos de la deuda millonaria y evitar el pago. La detención de Piccirillo, tras una intensa búsqueda, ha sido recibida por la pareja como una victoria parcial, aunque el miedo y la incertidumbre permanecen. La investigación continúa, y las declaraciones de Hauque y Aquino son clave para esclarecer lo sucedido y determinar el grado de participación de todos los involucrados, incluyendo la posible complicidad de Jesica Cirio.
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