El pasado sábado, el estadio Malvinas Argentinas de All Boys vibró con el recital de Don Osvaldo, pero no solo por la música. Pato Fontanet, líder de la banda, aprovechó la ocasión para lanzar una andanada de críticas incendiarias contra el gobierno de Javier Milei, acusándolo de prácticas similares a las de regímenes dictatoriales.

Con un lenguaje directo y contundente, Fontanet expresó desde el escenario: “No es ni gracioso ni novedoso. La verdad, que esta manga de gatos tenga la potestad de salir a dispararle a la gente, muestra lo que son”. Sus palabras hacían referencia a la represión policial ocurrida semanas atrás durante una protesta de jubilados frente al Congreso.

El exvocalista de Callejeros profundizó su crítica estableciendo un crudo paralelismo histórico: “Ser nazi no es ninguna novedad: lo hizo Hitler, lo hizo Onganía, lo hizo Videla. Salir a tirarle tiros a la gente que reclama… porque los jubilados para poder serlo quiere decir que trabajaron”.

Esta no es la primera vez que Fontanet critica a Milei. En 2022, durante la campaña electoral, ya lo había tildado de "loco" y de tener "cara de nazi", declaraciones que derivaron en una denuncia judicial por parte del entonces candidato presidencial. Un año después, con Milei en la presidencia, Fontanet redobló la apuesta, modificando la letra de su canción "Puede" para incluir la pregunta retórica: “¿Pueden los nazis ser tu gobierno?”.

Las declaraciones de Fontanet provocaron un aluvión de reacciones en las redes sociales, dividiendo a la opinión pública. Mientras algunos usuarios aplaudieron su valentía por expresar su postura crítica, otros consideraron sus palabras excesivas e inapropiadas para un contexto musical.

El incidente generó un debate sobre la libertad de expresión de los artistas y la responsabilidad social de las figuras públicas. La controversia continúa alimentando el diálogo político y social en Argentina, donde la figura de Javier Milei genera opiniones encontradas y polarizadas.

La presentación de Don Osvaldo quedará en la memoria no solo por su música, sino también por la carga política que la acompañó y la polémica generada por las declaraciones de su líder. El hecho expone la creciente tensión social y el rol que algunos artistas deciden asumir en el debate público.