La Confederación General del Trabajo (CGT) anunció un paro general de 24 horas para el 10 de abril, con movilizaciones el día anterior. La medida, que afectará severamente el transporte público, se suma a las crecientes tensiones entre el gobierno de Milei y los sindicatos.
La CGT, principal central obrera de Argentina, ha decretado un paro general de 24 horas para el jueves 10 de abril de 2025. Esta decisión, que implica la paralización de actividades en todo el país, se suma a dos jornadas de movilizaciones previas: una el miércoles 9 de abril, en coincidencia con la marcha de jubilados, y otra el lunes 24 de marzo, en conmemoración del Día Nacional de la Memoria por la Verdad y la Justicia. El paro del 10 de abril afectará significativamente el transporte público en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA), ya que los gremios de trenes, colectivos y subtes se han sumado a la medida de fuerza.
La decisión de la CGT, que representa a una amplia gama de sindicatos, se tomó luego de una extensa reunión en la que se debatieron las diversas demandas del movimiento obrero. Entre los motivos principales para el paro, se destacan:
* **Libertad para negociar paritarias:** La CGT exige la libertad de negociar las paritarias salariales sin interferencias gubernamentales, denunciando la falta de respuestas del gobierno a sus reclamos.
* **Aumento de jubilaciones:** Se reclama un aumento urgente en las jubilaciones para paliar la creciente inflación.
* **Bono para jubilados:** La CGT apoya la discusión parlamentaria sobre un bono de $760.000 para jubilados.
* **Repudio a la represión:** La central obrera repudió la represión policial ocurrida durante una manifestación de jubilados la semana anterior.
* **Asignaciones familiares:** Se solicita la revisión y actualización de las asignaciones familiares.
* **Sector productivo e industrial:** La CGT exige medidas para proteger al sector productivo e industrial argentino.
* **Reactivación de la obra pública:** Se demanda la reactivación de obras públicas paralizadas, argumentando las pérdidas económicas y sociales que esto genera.
El paro del 10 de abril será el tercero durante la gestión del presidente Javier Milei, mostrando la creciente tensión entre el gobierno y los sindicatos. Si bien inicialmente existió una falta de consenso dentro de la CGT, finalmente se logró la unificación de las diferentes fracciones, incluyendo a gremios como SMATA, Canillitas, La Bancaria y los del sector transporte. Incluso la Unión de Trabajadores de la Economía Popular (UTEP) ha expresado su apoyo a las movilizaciones.
La respuesta del gobierno ha sido de rechazo, acusando a la CGT de actuar con fines políticos y de no haber protestado durante la gestión anterior. Sin embargo, desde la CGT se argumenta que estas medidas son necesarias para defender los derechos de los trabajadores y trabajadoras argentinas frente a las políticas económicas del gobierno.
Las próximas semanas serán cruciales para observar la evolución de este conflicto y sus implicaciones en el panorama político y social argentino.