Tras su paso por Cruz Azul, Martín Anselmi llegó al Porto con la esperanza de replicar el éxito, pero la realidad ha sido otra. Su gestión en el equipo portugués está lejos de ser la esperada, generando frustración entre los aficionados y alimentando rumores sobre su futuro. **Un inicio prometedor, un final decepcionante:** Anselmi comenzó su andadura en el Porto con una victoria en la Europa League contra el Maccabi Tel-Aviv. Sin embargo, este rival resultó ser un equipo de bajo nivel que no llegó ni a los Play Offs, dejando una victoria sin mucho significado. La eliminación en la siguiente ronda ante la Roma, tras un empate 1-1 en la ida y una derrota 4-3 en el global, fue un duro golpe. A esto se suma la eliminación previa en las dos copas locales, antes incluso de su llegada al club. **La Primeira Liga: una lucha por la Europa League:** Con las copas y la Europa League fuera de alcance, la única meta que queda para el Porto es la Primeira Liga. Pero ahí tampoco las cosas marchan bien. Aunque el equipo mantiene el invicto en liga, sus números son decepcionantes: tres empates y una sola victoria, frente al Farense, un equipo que lucha por evitar el descenso. Esta falta de contundencia ha relegado al Porto al tercer puesto, a seis puntos de los líderes Benfica y Sporting. La clasificación a la próxima Europa League parece ser el objetivo más realista para Anselmi. **La presión de la afición:** La frustración de la afición por los resultados es evidente. En una conferencia de prensa tras el empate ante Guimarães, Anselmi reconoció entender perfectamente esta situación, compartiendo la decepción de los hinchas que esperaban la victoria. **Un futuro incierto:** Mientras la distancia con el Benfica se amplía, las perspectivas de Anselmi en el Porto parecen disminuir. Su rendimiento en la liga portuguesa no está a la altura de las expectativas, y la falta de títulos se cierne sobre su gestión. Los rumores de un distanciamiento con el Benfica, que había sido una posibilidad, se hacen cada vez más fuertes, dejando un panorama incierto para el entrenador argentino. La temporada se perfila como una oportunidad perdida, con la sombra de la 'cruzazuleada' persiguiendo a Anselmi en su paso por tierras portuguesas.