La primera noche de la Fiesta de la Confluencia 2025 en Neuquén vibró al ritmo de Los Palmeras, una de las bandas más esperadas del evento. Sin embargo, la presentación estuvo marcada por la ausencia del emblemático vocalista Rubén "Cacho" Deicas, quien sufrió un accidente cerebrovascular (ACV) en diciembre del año pasado. Este acontecimiento generó incertidumbre entre los fanáticos, pero Los Palmeras demostraron su profesionalismo y capacidad de adaptación. En lugar de Cacho, fue Pablo López, hijo de Sergio "Panchito" López (ex integrante de la banda), quien se encargó de liderar la voz en el escenario. Pablo, quien se unió a Los Palmeras en 2021 como corista y percusionista, demostró su talento vocal y cautivó al público neuquino con una destacada actuación. Su presencia en el escenario fue una muestra de la unidad y la capacidad de resiliencia de la banda. Marcos Camino, líder de Los Palmeras, explicó en una entrevista con "El Litoral" la situación de Cacho Deicas: "Está ansioso por volver, pero le pedí que no se apure, que no se estrese. Su rehabilitación lleva tiempo y lo más importante es su bienestar". Si bien Cacho fue dado de alta médica, continúa con su tratamiento de rehabilitación, por lo que su regreso a los escenarios aún no tiene fecha confirmada. El show de Los Palmeras en la Fiesta de la Confluencia fue un éxito, demostrando que la banda sigue vigente y unida a pesar de las circunstancias. La presentación de Pablo López como vocalista fue recibida con entusiasmo por el público, quien vibró con los clásicos de la cumbia santafesina. La ausencia de Cacho Deicas generó cierta nostalgia, pero la energía y el talento del resto de los integrantes, junto a la impecable performance de Pablo, supieron llenar el vacío dejando una noche inolvidable. Posteriormente, Los Palmeras publicaron un video en sus redes sociales para aclarar la situación, confirmando su unión y asegurando que el regreso de Cacho es solo cuestión de tiempo. El mensaje transmitió tranquilidad a sus seguidores y reafirmó el compromiso de la banda con su música y su público, dejando en claro que "hay Palmeras para rato". El éxito del show en Neuquén marcó un hito en la historia de la banda, demostrando que Los Palmeras son más que un grupo musical; son una familia que se enfrenta a los desafíos con unidad y perseverancia.