El estadio Julio Humberto Grondona de Sarandí fue testigo de una goleada contundente de Lanús sobre General Lamadrid por 4-0 en el marco de la Copa Argentina. El Granate, mostrando una superioridad notoria, superó sin inconvenientes al equipo de la Primera C y se clasificó a la siguiente fase del torneo. El encuentro, que se disputó el 5 de febrero de 2025, dejó en claro la diferencia de categoría entre ambos equipos, con Lanús exhibiendo un juego fluido y efectivo. Marcelino Moreno fue la figura indiscutible del partido, anotando un doblete que dejó sin respuesta la defensa de General Lamadrid. Su aporte goleador, sumado a los tantos de Dylan Aquino y Franco Orozco, sellaron una victoria que dejó satisfechos a los dirigidos por Mauricio Pellegrino. Esta goleada llega en un momento clave para Lanús, que busca recuperarse de un irregular comienzo en la Liga Profesional. Las dos derrotas iniciales habían generado cierta inquietud, pero la victoria sobre Sarmiento de Junín en la fecha anterior y este contundente triunfo en Copa Argentina le inyectan optimismo al equipo. Para el entrenador Pellegrino, el partido representó una oportunidad para probar algunas formaciones y darle minutos a jugadores que no han tenido tanta continuidad. El técnico aprovechó el encuentro para observar el desempeño del plantel y ajustar detalles tácticos, ya que espera un rival más difícil en la próxima ronda, cuyo enfrentamiento lo enfrentará al ganador de Velez vs. Ferrocarril Midland. Por el lado de General Lamadrid, el equipo, a pesar de la derrota, se mostró con una entrega encomiable ante un rival superior, demostrando su garra y competitividad propias de un conjunto que se ha destacado en el ascenso. El partido también fue una oportunidad para disfrutar de un buen espectáculo futbolístico, lleno de goles y momentos de brillantez por parte del conjunto granate. Los hinchas de Lanús pudieron celebrar una victoria contundente que les permite soñar con avanzar aún más en la Copa Argentina. La próxima ronda se presenta como un gran desafío para el equipo de Pellegrino, que espera llegar con la moral alta y la confianza renovada para encarar ese nuevo desafío en la competencia. En definitiva, el partido fue un claro ejemplo de la diferencia de jerarquía entre la Primera División y la Primera C. Sin embargo, el encuentro destacó la importancia de la Copa Argentina como una instancia donde los equipos de divisiones inferiores tienen la oportunidad de enfrentarse a grandes clubes y mostrar su talento. Para Lanús, es una inyección de moral que puede servir para mejorar su desempeño en el resto de la temporada.