Alianza Lima se encuentra ante un desafío de alta intensidad: la exigente combinación de partidos de la Copa Libertadores y la Liga 1 2025. El inicio de temporada presenta una seguidilla de encuentros que pondrán a prueba la resistencia física y la capacidad estratégica del equipo 'blanquiazul'. El debut en la Copa Libertadores el 5 de febrero ante Nacional de Paraguay, en Asunción, marca el inicio de una carrera contra reloj. Apenas tres días después, el 8 de febrero, Alianza debe recibir a Cusco FC en Matute por la primera fecha de la Liga 1. Esta apretada agenda se mantendrá durante todo febrero y parte de marzo, obligando al cuerpo técnico a tomar decisiones cruciales en la rotación del plantel y la gestión de las energías de sus jugadores. La planificación estratégica se vuelve fundamental. El entrenador, Néstor Gorosito, deberá considerar con mucha atención la gestión de minutos de sus jugadores clave, como Paolo Guerrero y Hernán Barcos. La rotación inteligente, la utilización de la banca y un riguroso programa de recuperación física se convertirán en aspectos determinantes para mantener el rendimiento en ambas competiciones. El éxito dependerá de su capacidad para equilibrar los esfuerzos y evitar el desgaste excesivo, maximizando al mismo tiempo el potencial de cada uno de los jugadores a su disposición. En las primeras dos semanas de febrero, Alianza Lima disputará cuatro partidos en tan solo 11 días. Esto significa una alta demanda física y mental para cada jugador. Añadir la incertidumbre de una eventual clasificación a la siguiente ronda de la Libertadores, con dos encuentros más contra Boca Juniors, agrava la situación. El equipo podría llegar a disputar hasta siete partidos en un periodo de tiempo muy corto. El calendario no da respiro: Luego del partido de vuelta contra Nacional en Lima (12 de Febrero), Alianza deberá viajar a Trujillo para enfrentar a Alianza Atlético el 15 de Febrero, y posteriormente, recibirá a Juan Pablo II en Matute el 21 de Febrero. El clásico contra Sporting Cristal y el encuentro contra Ayacucho FC, también en Matute, completan un mes de febrero y marzo altamente exigentes. La clave del éxito estará en la gestión del plantel. El 'Pipo' Gorosito deberá equilibrar la necesidad de obtener resultados en ambas competiciones con la preservación física de sus jugadores estrella. Se espera que se apoye en la rotación de jugadores, una buena preparación física y un plan táctico flexible que pueda adaptarse a las diferentes exigencias de cada encuentro. La experiencia y la capacidad de reacción de la plantilla serán cruciales para sobrellevar este reto. En resumen, el inicio de la temporada 2025 presenta un desafío mayúsculo para Alianza Lima. La habilidad del cuerpo técnico para gestionar el plantel y su capacidad de adaptación serán claves para navegar con éxito las exigentes aguas de la doble competencia, con el objetivo de destacar tanto en la escena nacional como en la internacional.