Julián Álvarez, el máximo goleador del Atlético de Madrid, se encuentra en una situación delicada antes del partido contra el Mallorca. Con cuatro tarjetas amarillas en su haber, una amonestación más lo dejaría fuera del trascendental derbi madrileño contra el Real Madrid. Este escenario obliga al 'Araña' a extremar la precaución en el encuentro ante el equipo balear. El delantero argentino, llegado al Atlético a mediados de 2024 procedente del Manchester City, ha anotado 16 goles esta temporada, convirtiéndose en una pieza clave en el esquema de Diego Simeone. Sin embargo, la proximidad del derbi añade una capa extra de presión. Una suspensión significaría una baja sensible para el equipo rojiblanco en un partido que puede definir el curso de la temporada. El 'Cholo' Simeone, en su habitual estilo pragmático, se ha mostrado enfocado en el partido inmediato: "Pensamos en el partido de este sábado, no en el del sábado que viene. Y tenemos otro en medio en Copa del Rey (vs. Getafe). No hay otra cosa que pensar en lo que creemos que le podemos hacer daño al Mallorca". Aunque Simeone ha insinuado la posibilidad de rotar a Álvarez o a Griezmann para darle descanso a Alexander Sorloth, la decisión final se tomará cerca del partido. El técnico argentino ha reconocido la buena forma de sus delanteros: "El otro día ya tuvo movimiento. Tuvo cerca de 35 minutos. Es bueno volver a sentirse dentro del equipo después de su lesión corta. Veremos este sábado con quién empezamos. Tenemos la posibilidad de tener a Correa bien, a Julián muy bien, a Antoine en su línea y a Sorloth con muchas ganas de jugar, así que este sábado por la mañana decidiremos quién empieza". La importancia de Álvarez para el Atlético es innegable. Junto a Griezmann, Sorloth y Correa, concentra una gran parte del poder ofensivo del equipo (45 de los 65 goles anotados en la temporada). Sin embargo, Simeone también ha destacado la necesidad de mejorar la capacidad goleadora del resto del equipo: "Está claro que necesitamos goles en todas las facetas del juego. Ni que hablar de los defensas, también, sobre todo en la pelota parada. Y para eso necesitamos trabajar, generar situaciones similares a las que puedan aparecer en los partidos para que, a partir de la confianza y repetición, aparezca esa tranquilidad que hay que tener para resolver ciertas situaciones". El partido contra el Mallorca se presenta como un desafío táctico y disciplinario para Álvarez. El equilibrio entre la ambición de marcar goles y la necesidad de evitar una tarjeta amarilla será crucial para el delantero argentino y para las aspiraciones del Atlético de Madrid en la lucha por el título. El Atlético de Madrid recibirá al Mallorca este sábado, mientras que el derbi contra el Real Madrid se disputará la semana siguiente. Entre ambos encuentros, el Atlético jugará un partido de cuartos de final de la Copa del Rey contra el Getafe. La presión es máxima y la prudencia, para Álvarez, se convierte en una necesidad imperativa.