Colombia aseguró su lugar en el hexagonal final del Sudamericano Sub-20 tras vencer a Bolivia y beneficiarse del triunfo de Brasil. Análisis del partido, reacciones y lo que sigue para la Tricolor.
Tras un emocionante encuentro en la cuarta fecha del Grupo B del Sudamericano Sub-20, Colombia logró una victoria crucial por 3-2 ante Bolivia, sellando su pase al hexagonal final del torneo. Este triunfo, combinado con la victoria de Brasil sobre Ecuador, aseguró el avance de la selección colombiana a la siguiente fase, donde se enfrentarán a los mejores equipos del continente.
El partido comenzó con una intensidad notable. Apenas iniciado el encuentro, Neiser Villarreal anotó un golazo desde fuera del área, abriendo el marcador para Colombia al minuto 1. La ventaja se amplió a los 15 minutos gracias a una gran presión alta que Kener González concretó en gol. El 2-0 en el marcador daba una apariencia de tranquilidad a Colombia, pero Bolivia reaccionó en el segundo tiempo.
A los 15 minutos del segundo tiempo, Bolivia descontó, poniendo el 2-1 y generando presión sobre la defensa colombiana. Los minutos posteriores fueron de alta tensión, con Bolivia luchando por igualar el marcador y Colombia defendiendo su ventaja con ahínco. Sin embargo, un gol de Montaño a los 25 minutos del segundo tiempo volvió a alejar a la selección colombiana de cualquier peligro, estableciendo el 3-1. A pesar de un descuento final por parte de Bolivia, Colombia aguantó el resultado hasta el pitazo final.
El triunfo de Brasil sobre Ecuador fue fundamental para la clasificación de Colombia. Con este resultado, la Tricolor aseguró su lugar en el hexagonal, cerrando su participación en la fase de grupos con un partido ante Brasil, un encuentro que afrontarán con la tranquilidad de ya estar clasificados.
El entrenador de Colombia, César Torres, destacó el trabajo en equipo y la resiliencia del plantel. “Trabajamos en equipo, necesitamos que todo esté bien tanto desde lo físico como desde lo mental”, afirmó tras el partido. También reconoció la dificultad del partido contra Bolivia, un rival que puso en aprietos a la selección colombiana.
Previo al partido, las expectativas eran altas. Las posibles formaciones de ambos equipos se analizaron exhaustivamente. Se destacaba la buena racha de Colombia, con 12 partidos sin conocer la derrota, en contraposición al pobre desempeño de Bolivia, que llevaba 12 partidos sin ganar. Finalmente, el rendimiento en cancha respaldó las aspiraciones colombianas.
La clasificación al hexagonal representa un importante paso para Colombia en su objetivo de clasificarse para la Copa Mundial Sub-20. El camino aún es largo y exigente, pero el equipo ha demostrado su capacidad para superar desafíos y se muestra confiado en lo que se avecina.