El Estadio Olímpico de Montjuic vibró con un partidazo entre el FC Barcelona y el Atalanta en la última fecha de la fase de grupos de la UEFA Champions League 2024/25. El encuentro, que finalizó con un emocionante 2-2, ofreció un espectáculo de ida y vuelta durante los 90 minutos, con ambos equipos buscando la victoria a pesar de la clasificación previa del Barça a octavos de final. Desde los primeros minutos se evidenció la intensidad del partido. Tanto Barcelona como Atalanta generaron oportunidades claras de gol, demostrando su ambición ofensiva. La falta de precisión y las excelentes actuaciones de los porteros impidieron que el marcador se moviera durante la primera parte, que finalizó con un 0-0 que reflejaba la igualdad en el juego. La segunda parte comenzó con la explosión de talento de Lamine Yamal. A segundos de iniciarse el complemento, una jugada de contraataque culminó con un golazo del joven de 17 años. Un pase magistral de Robert Lewandowski desde el centro del campo, una asistencia de Raphinha, y una definición exquisita de Yamal ante el portero, sellaron el 1-0 para el Barcelona. El Atalanta no se achicó y respondió con un golazo de Ederson, quien con un potente remate desde la frontal del área marcó el empate 1-1. El partido continuaba con el mismo ritmo frenético y ocasiones para ambos equipos. Ronald Araujo, con un cabezazo preciso, puso el 2-1 para el Barcelona a los 72 minutos, desatando el júbilo de la afición local. Parecía que el triunfo se quedaba en casa, pero el Atalanta, con la garra característica de su estilo, logró el empate a los 79 minutos. Un centro preciso de Marten de Roon encontró a Mario Pasalic, quien marcó el 2-2 definitivo tras un remate algo fortuito. Con este resultado, el Atalanta finalizó noveno en su grupo y deberá disputar los play-offs para acceder a los octavos de final de la Champions League. El Barcelona, a pesar del empate, aseguró la segunda posición del grupo, tres puntos por detrás del Liverpool, líder indiscutible. El partido pasará a la historia por su intensidad, emoción y la brillante actuación de Lamine Yamal, nombrado MVP del encuentro. Su talento deslumbró a los asistentes y confirmó su potencial como una de las futuras estrellas del fútbol mundial. Un encuentro que dejó a todos con ganas de más y una clara demostración de que la Champions League continúa regalando emociones únicas.