Selena Gómez, reconocida por su talento artístico y su activismo, ha vuelto a ser noticia por su abierta crítica a las políticas migratorias implementadas durante la presidencia de Donald Trump. En un video publicado en sus historias de Instagram, ahora eliminado, la artista expresó su angustia por la situación de los inmigrantes, especialmente los niños, utilizando emotivas palabras que resonaron con muchos de sus seguidores.
Las imágenes, donde se le veía visiblemente afectada, mostraban una Selena Gómez con lágrimas en los ojos, denunciando el impacto negativo de estas políticas en las familias inmigrantes. Su mensaje, aunque breve, fue contundente: “Mi gente está siendo atacada, los niños. No lo entiendo.” La eliminación posterior del video, atribuida a la ola de comentarios negativos recibidos, no disminuyó el impacto de sus palabras, generando un debate en redes sociales acerca de la importancia de la empatía y el uso de plataformas de influencia para causas sociales.
Esta no es la primera vez que Gómez se pronuncia en contra de las políticas anti-inmigrantes. Su compromiso con la causa es evidente en su trayectoria, especialmente con el documental “Living Undocumented”, producido por ella en 2019, que ofreció una perspectiva íntima sobre la vida de familias inmigrantes en Estados Unidos, mostrando sus luchas diarias bajo la amenaza constante de la deportación. Este trabajo audiovisual no solo permitió visibilizar la realidad de muchos, sino que también abrió un espacio para la reflexión y el diálogo en torno a un tema crucial para la sociedad estadounidense.
Además de su labor audiovisual, Gómez ha escrito artículos para publicaciones importantes como Time, donde compartió la historia de su propia familia. En este texto personal, la actriz relató el arduo viaje de su tía, quien cruzó la frontera entre México y Estados Unidos escondida en un camión durante la década de los noventa, evidenciando las dificultades y riesgos que enfrentan los inmigrantes en su búsqueda de una vida mejor. La experiencia familiar le ha dado a Gómez una perspectiva única y profunda, alimentando su compromiso y motivación para defender los derechos de los inmigrantes.
La respuesta de Gómez a las críticas recibidas por compartir su video, donde declaró: “Al parecer, no está bien mostrar empatía por las personas”, subraya la polarización del debate en torno a la inmigración y la necesidad de un diálogo respetuoso y constructivo. Su valentía para expresar su opinión, a pesar de las reacciones negativas, la consolida como una figura influyente en la defensa de los derechos humanos y un ejemplo de cómo la empatía y la acción pueden marcar la diferencia.
El caso de Selena Gómez resalta el papel crucial que juegan las figuras públicas en la sensibilización de la población sobre temas sociales. Su compromiso demuestra que la influencia puede ser utilizada para generar conciencia y promover la justicia social, a pesar de las posibles controversias o críticas. El debate que ha generado su video continúa alimentando el necesario análisis sobre las políticas migratorias y el impacto que éstas tienen en la vida de las personas.