Ingrid Grudke, la reconocida modelo argentina, ha roto el silencio para hablar sobre la dolorosa separación de su pareja, Martín Colantonio, tras descubrir una infidelidad que ha conmocionado al mundo del espectáculo. La traición no solo involucra a Colantonio, sino también a Andrea Miranda, esposa de Santiago, sobrino de Grudke y empleada en los negocios que la pareja compartía. Durante seis años, Grudke y Colantonio mantuvieron una relación aparentemente sólida, que incluía una sociedad empresarial. Juntos construyeron Colmar, una empresa con siete locales, en la que Miranda ocupaba un puesto clave, manejando finanzas, publicidad y compras. Esta cercanía familiar y profesional fue el escenario perfecto para una traición que, según Grudke, fue descubierta hace tres meses. La noticia se filtró inicialmente como un rumor, negado por la pareja. Sin embargo, una amiga y la propia empleada doméstica de la pareja alertaron a Grudke sobre un posible engaño entre Colantonio y Miranda. El detonante fue la confirmación por parte del sobrino de Grudke, Santiago, quien ya se había separado de Miranda tras descubrir chats comprometedores entre ella y su tío. El enfrentamiento posterior entre Grudke y Colantonio resultó en una separación definitiva. Grudke describe la situación con una mezcla de dolor y conmoción. En entrevistas, ha confesado sentir una “estafa emocional” al descubrir imágenes de Colantonio y Miranda besándose en el ascensor de su edificio, mientras ella se encontraba en otra habitación. La traición es doble, considerando su afecto hacia Miranda y la confianza depositada en Colantonio. El impacto en la familia ha sido devastador. Actualmente, Grudke no mantiene contacto con ninguno de los dos. El caso va más allá de una infidelidad amorosa. La complicidad entre Colantonio y Miranda en el ámbito empresarial ha generado un proceso de división de bienes y negocios. La inversión de Grudke en Colmar, su imagen y contactos, fueron fundamentales para el crecimiento de la empresa, y ahora se encuentran en el centro de una compleja negociación legal. La historia de Grudke y Colantonio comenzó en 2018 en Mar del Plata, un encuentro casual que terminó consolidándose en una relación que duró hasta hace tres meses. La pareja se mudó a Posadas, ciudad natal de Grudke, en plena pandemia, buscando mayor cercanía con la familia. Ahora, ese mismo lazo familiar se ha convertido en el epicentro del dolor y la traición. A pesar del dolor, Grudke ha mostrado fortaleza y resiliencia. Se apoya en su trabajo, en el cariño de su familia y amigos, y en el apoyo recibido por sus seguidores. Sus redes sociales reflejan un mensaje de agradecimiento por el amor y respeto recibidos, y la firme determinación de seguir adelante, un proceso que reconoce llevará tiempo. La historia de Ingrid Grudke es un crudo recordatorio de la fragilidad de la confianza y el impacto devastador que la traición puede tener en la vida de una persona.