El FC Barcelona se enfrenta a una grave crisis financiera que ha provocado la exclusión de Dani Olmo y Pau Víctor de la plantilla oficial de LaLiga. ¿Podrá el club resolver la situación antes del próximo partido?
El inicio del año 2025 ha traído una tormenta perfecta para el FC Barcelona. LaLiga ha rechazado la inscripción de dos jugadores clave, Dani Olmo y Pau Víctor, dejando al club catalán en una situación crítica. Esta decisión, tomada el 31 de diciembre, se debe al incumplimiento de las normas de control económico de LaLiga, a pesar de las promesas del club de solucionar la situación inminente con la venta de palcos VIP del nuevo Spotify Camp Nou.
Según fuentes de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), el organismo no puede intervenir hasta que LaLiga dé su aprobación. La patronal, en un comunicado contundente, afirmó que el Barcelona no había presentado ninguna alternativa viable para cumplir con la normativa. Esta situación deja al club en una posición extremadamente vulnerable, con dos figuras importantes fuera de la plantilla oficial.
El caso de Dani Olmo es particularmente preocupante. Su contrato incluye una cláusula que le permitiría rescindirlo y obtener una cuantiosa indemnización, convirtiéndose en agente libre. A pesar de esta posibilidad, Olmo acudió a los entrenamientos con normalidad el 1 de enero, mostrando una aparente confianza en una solución favorable.
La directiva del Barcelona, encabezada por Joan Laporta, ha intentado justificar su situación alegando que la norma que impide inscribir dos veces al mismo jugador en una misma temporada está desfasada y debería modificarse. Sin embargo, esta estrategia ha sido criticada por algunos, poniendo en duda la credibilidad de la gestión directiva. El club argumenta que la venta de los palcos VIP del Spotify Camp Nou, generando ingresos cercanos a los 100 millones de euros, solucionará el problema a más tardar el 3 de enero. Si esto no ocurre, las consecuencias podrían ser devastadoras.
El Barcelona espera recibir los fondos en los próximos días para cumplir con los requisitos de LaLiga y así inscribir a Olmo y Víctor. Pero la incertidumbre persiste. Si la inscripción no se realiza, Olmo podría ejercer su derecho a rescindir contrato, costándole al club una gran indemnización más el pago pendiente al RB Leipzig por su traspaso. La pérdida de un jugador de la talla de Olmo sería un golpe devastador para el club, tanto deportiva como económicamente.
Mientras tanto, la presión sobre el Barcelona aumenta. El entrenador Hansi Flick y el club deberán enfrentar la incertidumbre públicamente, lo que agregará una capa adicional de estrés a una situación ya precaria. El futuro del club en este inicio de año pende de un hilo, y la resolución de esta crisis financiera podría definir su desempeño en el resto de la temporada.