Revive la polémica final de la Copa Intercontinental 2001 entre Boca Juniors y Bayern Munich. Analizamos el arbitraje, las jugadas claves y por qué aún hoy se recuerda como 'El Robo del Siglo'.
El sorteo del Mundial de Clubes 2025 ha enfrentado nuevamente a Boca Juniors y Bayern Munich, reviviendo los fantasmas de la final de la Copa Intercontinental 2001. Un partido que, para muchos hinchas xeneizes, sigue siendo sinónimo de injusticia y que se recuerda con el doloroso calificativo de "El Robo del Siglo". Pero ¿qué sucedió realmente en esa final disputada en Tokio? Analicemos los hechos que marcaron el encuentro y perpetuaron la polémica.
**La Previa: Un clima de sospecha**
Boca Juniors llegaba a la final como el bicampeón de América, con un equipo liderado por Carlos Bianchi y figuras como Juan Román Riquelme, Marcelo Delgado y Mauricio Serna. Tras su victoria sobre el Real Madrid en la Intercontinental 2000, el equipo argentino imponía respeto en el fútbol mundial. Sin embargo, la designación del árbitro danés Kim Nielsen generó suspicacias en el entorno xeneize, avivando temores de un posible favoritismo hacia el equipo europeo.
**El Partido: Un festival de irregularidades**
Desde el comienzo, el arbitraje de Nielsen se caracterizó por una notable disparidad en el trato a ambos equipos. Mientras que Boca Juniors sufrió un rigor excesivo en las sanciones, el Bayern Munich gozó de una notable permisividad. La violencia ejercida sobre Riquelme, quien a pesar de las patadas constantes demostró su talento, pasó desapercibida para el árbitro. La expulsión de Marcelo Delgado por doble amarilla dejó a Boca con diez jugadores durante todo el segundo tiempo, complicando aún más la situación.
La jugada más controvertida fue sin duda la plancha de Paulo Sérgio sobre Riquelme, una acción que a todas luces merecía la tarjeta roja, pero que Nielsen sancionó con una mera advertencia. Asimismo, el gol de Sami Kuffour estuvo precedido por una clara falta de Giovane Élber sobre Clemente Rodríguez, una infracción que el árbitro inexplicablemente omitió. Incluso años después, Élber reconoció su infracción en la jugada.
**Las Secuelas: Un recuerdo imborrable**
El Bayern Munich se impuso por 1-0 gracias al gol de Kuffour, pero la victoria quedó manchada por la polémica. La sensación de injusticia se apoderó del plantel y la afición boquense, y el partido pasó a la historia como "El Robo del Siglo". La imagen de Mauricio Serna estrechando la mano de Oliver Kahn, con los árbitros representados como personajes de la serie "La Casa de Papel", se convirtió en un símbolo de la frustración y la indignación.
**El Reencuentro: Una oportunidad de revancha**
El sorteo del Mundial de Clubes 2025 ha generado una gran expectación, ofreciendo a Boca la posibilidad de saldar cuentas pendientes con el Bayern Munich. Para los jugadores que vivieron aquella final, como Román Riquelme, Chicho Serna y el Chelo Delgado, este enfrentamiento representa una oportunidad de revancha, una posibilidad de escribir un nuevo capítulo en la historia de esta rivalidad marcada por la polémica.
En conclusión, la final de la Copa Intercontinental 2001 entre Boca Juniors y Bayern Munich no solo fue un partido de fútbol, sino un evento que trascendió las canchas y que aún hoy sigue generando debate. El recuerdo de "El Robo del Siglo" seguirá vivo mientras exista la memoria de un arbitraje que, para muchos, inclinó la balanza de manera decisiva hacia el equipo alemán.