El Atlético de Madrid superó al Cacereño en un emocionante encuentro de Copa del Rey gracias a los goles de Rodrigo De Paul y Julián Álvarez. Descubre el resumen del partido y los detalles de una victoria agónica.
En un partido vibrante y lleno de alternativas, el Atlético de Madrid logró superar al Cacereño por 3-1 en la Copa del Rey. El encuentro, disputado en el Estadio Príncipe Felipe ante una multitud, estuvo marcado por la resistencia del equipo de Segunda RFEF y la remontada final del conjunto colchonero.
El Cacereño sorprendió al abrir el marcador a los 30 minutos con un golazo de Álvaro García Merencio tras una veloz contraataque. El Atlético, a pesar de su dominio territorial, tuvo dificultades para concretar sus ocasiones, encontrando una férrea defensa local. El marcador a favor del Cacereño se mantuvo hasta el minuto 83, cuando Clément Lenglet empató con un certero cabezazo tras un córner.
La tensión se apoderó del encuentro en los minutos finales. Rodrigo De Paul, al minuto 90, marcó el 2-1 con un disparo desde fuera del área que se desvió en un defensor. Finalmente, Julián Álvarez, ingresado en la segunda mitad, selló la victoria con un golazo en el tiempo añadido, definiendo con calidad una jugada individual para sentenciar el 3-1.
El aporte de los argentinos De Paul y Álvarez fue fundamental para el triunfo. Ambos jugadores demostraron su talento y capacidad decisiva en momentos cruciales del partido. Por su parte, Diego Simeone, entrenador del Atlético, fue expulsado del encuentro por protestas.
La victoria del Atlético de Madrid, aunque sufrida, ratifica su superioridad y su capacidad para superar obstáculos en la Copa del Rey. La resistencia del Cacereño, un equipo de categoría inferior, fue digna de destacar, mostrando un juego combativo y eficiente que complicó en gran medida las aspiraciones del equipo de Simeone.
El partido dejó momentos de gran intensidad y emoción, con jugadas destacadas de ambos equipos. El Atlético de Madrid avanza a la siguiente ronda de la Copa del Rey, dejando atrás un partido que recordará por su complejidad y la contundencia final de sus figuras argentinas.