El ingreso de Jenifer Lauría a Gran Hermano 2025 ha generado un tsunami mediático. La modelo y diseñadora, expareja del futbolista Ricardo Centurión, no solo ha cautivado al público con su personalidad, sino que también ha destapado una caja de Pandora al revelar detalles íntimos y dolorosos de su relación con el controversial deportista. Desde su primera noche en la casa, Lauría no escatimó en detalles, confesando que su romance con Centurión, padre de su hija Emma, comenzó como un cuento de hadas, pero rápidamente se convirtió en una pesadilla. Si bien inicialmente describió la relación como "ideal", las cosas cambiaron radicalmente durante su embarazo, cuando según sus propias palabras, su vida se transformó en "un infierno". La confesión más impactante fue la revelación de las múltiples infidelidades de Centurión, que Lauría atribuye como la principal causa de su separación. "Me cansé de que me meta los cuernos. Me hizo sufrir un montón", afirmó entre lágrimas, dejando en evidencia el dolor que aún la acompaña. Sin embargo, también enfatizó la profundidad de su amor por el futbolista: "Yo estaba súper enamorada de él, pero enamorada de verdad", admitiendo lo difícil que fue tomar la decisión de poner fin a la relación. Estas declaraciones no solo impactaron a sus compañeros en la casa, sino que también generaron una ola de reacciones en redes sociales. Videos de sus confesiones se volvieron virales, amplificando el alcance de sus palabras. Si bien Lauría aclaró que no buscaba el protagonismo mediático a través de su pasado con Centurión, su historia se convirtió, inevitablemente, en uno de los temas centrales de esta edición del reality. La situación se agravó con la reacción de la familia de Centurión, que desató una guerra virtual contra Lauría en redes sociales, acusándola de utilizar la figura del futbolista para obtener notoriedad dentro del programa. La sobrina del jugador llegó a afirmar: "Si no lo nombraba a mi tío, no entraba", mientras que su hermana expresó abiertamente su deseo de que Lauría fuera eliminada del reality. Incluso, la cuenta homenaje a Melody Pasini, expareja de Centurión fallecida en 2020, se sumó a las críticas, lanzando duras acusaciones contra Lauría. Lejos de amedrentarse, Lauría parece haber usado su experiencia como carta de presentación, consolidándose como una figura carismática y con una narrativa poderosa dentro de la casa. Su fortaleza y transparencia han resonado con el público, que sigue con atención el desarrollo de su historia y su desempeño en el programa. La polémica, sin duda, está servida, y el futuro de Lauría en Gran Hermano y la evolución de este conflicto familiar está por verse.