El nombre de Luiz Henrique, hasta hace poco desconocido para muchos, resonó con fuerza en el mundo del fútbol. Su paso fugaz por el Betis quedó eclipsado por su explosiva irrupción en Botafogo, donde se ha convertido en una pieza clave del equipo, brillando con luz propia en el Brasileirao y la Copa Libertadores. A sus 23 años, está a 90 minutos de conseguir el título continental y su nombre suena con insistencia en el Olympique de Lyon como posible salvador de un equipo inmerso en una profunda crisis. Su regreso a Brasil tras su experiencia en España fue un acierto. En Botafogo, formó parte de un ataque demoledor junto a figuras como Almada, Savarino e Igor Jesus, todos internacionales con sus respectivas selecciones. Su rendimiento ha sido excepcional, con siete goles en el Brasileirao y tres en la Libertadores, además de anotaciones en la Copa do Brasil y en partidos internacionales con la selección brasileña, donde marcó ante Chile y Perú. Su juego se caracteriza por su velocidad, potencia física y una precisión en los últimos metros que ha mejorado notablemente desde su paso por el Betis. Esta excelencia la ha trasladado a la selección, donde aprovechó al máximo sus oportunidades, demostrando su desborde y atrevimiento. El Observatorio del Fútbol CIES lo ha situado como el jugador más valioso del Brasileirao, con un valor estimado entre 26 y 35 millones de euros, superando con creces los 18 millones que pagó el Betis. Su juventud, experiencia y rendimiento en Europa lo convierten en un activo codiciado. Para Botafogo, su alto valor es una buena noticia, pero también un aviso de una posible salida. El Olympique de Lyon, con una deuda de 500 millones de euros y en riesgo de descenso, necesita alrededor de 100 millones en ventas para revertir la situación. Luiz Henrique se presenta como una pieza clave para alcanzar esa cifra. Si se concreta su traspaso, Luiz Henrique dejará una huella imborrable en Botafogo. El club pelea por el Brasileirao y buscará evitar que se repita la historia de 2023, cuando Palmeiras le arrebató el título en la recta final. Además, la final de la Copa Libertadores contra el Atlético Mineiro el 30 de noviembre puede consagrar un año histórico para el jugador, donde se enfrentará a Guilherme Arana, otro ex-Sevilla que ahora juega en Brasil, en un pequeño ‘derby sevillano’ en Buenos Aires. El futuro de Luiz Henrique parece estar lleno de posibilidades, y su nombre quedará grabado en la historia, ya sea como el héroe de la Copa Libertadores o como el salvador del Olympique de Lyon.