Riquelme, el héroe inesperado: Frenó un brutal enfrentamiento entre hinchas de Boca, Gimnasia y la Policía en la Copa Argentina
La violencia volvió a empañar un partido de fútbol en Argentina. Esta vez, el escenario fue el encuentro entre Boca Juniors y Gimnasia de La Plata por la Copa Argentina en Rosario. Durante el entretiempo, un brutal enfrentamiento entre hinchas de ambos equipos y la policía estuvo a punto de desatar una tragedia, pero la intervención del presidente de Boca, Juan Román Riquelme, logró frenar la situación.
Todo comenzó con agresiones de los fanáticos de Boca ubicados en la parte superior del sector destinado a su equipo, quienes lanzaron butacas hacia la popular de Gimnasia. La respuesta de los hinchas del Lobo fue intentar romper un acceso para responder, pero la policía intervino con balas de goma, provocando una reacción en cadena que involucró a jugadores de ambos planteles.
La situación se volvió caótica: la barra de Boca intentó cruzar la cancha para llegar a la popular de Gimnasia, mientras que los policías lanzaban balas de goma y gas pimienta para dispersar a la multitud. En medio del caos, Riquelme bajó desde su palco y se adentró en la tribuna para frenar la batalla. Su presencia calmada, junto a la de otros dirigentes del club, logró calmar a los hinchas de Boca y evitar una tragedia.
Riquelme se puso al frente, con las manos en alto, y logró contener a la barra brava de Boca. Su intervención fue clave para evitar que la situación se agravara aún más. La policía continuó con la represión, pero los hinchas del Xeneize ya no avanzaban. La calma volvió a la cancha y el partido continuó.
El episodio revive las preocupaciones sobre la seguridad en el fútbol argentino, donde la violencia es un problema que aún no se ha erradicado. La intervención de Riquelme fue un acto de valentía y responsabilidad, que seguramente será recordado por muchos como un momento clave para evitar una tragedia.
El fútbol argentino debe tomar medidas concretas para combatir la violencia en los estadios y garantizar la seguridad de los hinchas. Es necesario un trabajo en conjunto entre clubes, autoridades y la sociedad para erradicar este flagelo que empaña la pasión por el deporte.