Este jueves 5 de septiembre, se llevará a cabo un nuevo paro universitario de 24 horas en Argentina, con una movilización al Congreso Nacional. La medida es impulsada por diversas agrupaciones que buscan presionar al Senado para la aprobación de la Ley de Financiamiento Universitario, la cual ya cuenta con media sanción de Diputados.

La Asociación Gremial Docente de la UBA (AGD) ha expresado su apoyo al paro y a la movilización, destacando la importancia de la lucha docente, estudiantil y no docente en el primer cuatrimestre, la cual ha sido fundamental para lograr que la ley se debata en el Congreso. La AGD también reclama la continuidad y profundización del plan de lucha, incluyendo la exigencia de una nueva y masiva movilización para conquistar la recomposición salarial.

El Plenario de la CONADU Histórica, por su parte, ha definido un plan de acción en caso de que la ley no se apruebe, el cual incluye un paro nacional de 72 horas para la semana del 9 de septiembre, con acciones de visibilización. En este escenario, se podría convocar a una movilización multitudinaria similar a la que se llevó a cabo en abril pasado.

El conflicto salarial se desarrolla en un contexto de fuertes recortes en los fondos públicos destinados a la educación, producto del severo plan de ajuste implementado por el gobierno. Los trabajadores de la Universidad de Buenos Aires (UBA) han planteado la necesidad de lograr salarios dignos para garantizar una formación de excelencia para sus estudiantes.

La Ley de Financiamiento Universitario, que cuenta con media sanción de Diputados, busca actualizar las partidas presupuestarias de las universidades al 1 de enero de 2024 y hasta el 31 de diciembre de 2024, de forma bimestral y en función del índice de Precios al Consumidor (IPC). La ley también contempla la recomposición salarial de docentes y no docentes a partir del 1 de diciembre de 2023 y hasta el 31 de diciembre de 2024, de forma mensual y conforme a la inflación acumulada informada por el INDEC.

El gobierno, en la última reunión paritaria, propuso un aumento salarial del 3% para agosto y del 2% para septiembre. Esta oferta fue rechazada por los gremios, quienes la consideran insuficiente para cubrir el atraso salarial que enfrentan, calculado en un 50%.

La movilización al Congreso este jueves 5 de septiembre es un reflejo de la lucha de los trabajadores universitarios por lograr un financiamiento adecuado y una recomposición salarial justa, en un contexto de ajuste económico y recortes presupuestarios que afectan la educación pública.